Corazon de acero. Capitulo 10: Recuento

CAPITULO 10: Recuento.

Ante la atónita mirada de sus compañeros Robert tomó impulso y saltó hacia el grupo de atacantes. Antes de alcanzar el objetivo transformó sus brazos en afiladas hojas que apuntaban amenazadoras a sus perseguidores. El impacto fue brutal, cayó sobre el morro de un vehículo hundiéndolo en el fango mientras seccionaba el motor de otros dos transportes con sus cuchillas. Varios hombres salieron despedidos por el brusco frenazo y otros muchos se golpearon contra los trozos de chasis que salían volando en todas direcciones. Robert se incorporó y miró a su alrededor, estaba rodeado y le superaban en número.
-¡No!, tenemos que ayudarle- chilló Geera –Vamos Ed, ¡sígueme!- las lagrimas afloraron en sus ojos, pero algo la estaba sujetando el brazo. Su compañero negó con la cabeza pero no dijo ni una palabra más.
Un disparo rompió la tensión del momento, todavía les perseguía un transporte pesado con un artillero enfundado en una armadura metálica como la suya. Geera estaba paralizada y le temblaban las piernas, su corazón le obligaba a saltar del camión para ayudar a su hermano, al que ya no podía ver, pero su mente le decía que todo estaba perdido. Un potente disparo impactó en su cabeza derribándola sobre el techo del transporte. No había perdido el conocimiento pero seguía sin poder moverse, no tardó en romper a llorar. Ante la sorprendida mirada de Ed, el metal que recubría el cuerpo de la joven comenzó a perder solidez, terminando por desprenderse al completo. Geera se encontraba tumbada mirando al cielo con los ojos abiertos y llenos de lagrimas, despojada de su armadura.
-Baja al interior del remolque- le urgió Ed, -¡date prisa, yo acabaré con ellos!
Sus suplicas no obtuvieron respuesta pero los disparos enemigos no cesaron. Sin vacilar un instante recogió con suma delicadeza el cuerpo de la muchacha y lo apretó contra su pecho. Ed estaba en cuclillas dándole la espalda a sus perseguidores, protegiendo con su propio cuerpo la frágil figura de su amiga. Los escalofríos recorrieron el cuerpo de Geera ante el contacto del frío metal, pero abrazó con fuerza a su protector mientras oía restallar descargas eléctricas.
Los minutos se hicieron eternos pero poco a poco los disparos cesaron. Al parecer los perseguidores habían desistido frente a la habilidad del piloto de la Corporación, que ahora aminoraba la marcha. La joven abrió los ojos, recibiendo un paisaje mucho más familiar, estaban a muy pocos kilómetros de la colonia de Sufhion. Aunque se encontraba más calmada, la imagen de su hermano volvió a su cabeza haciendo que las lagrimas inundaran a sus ojos. Por un momento no fue consciente de su situación, pero un nuevo escalofrió le recordó que estaba en brazos de Ed, que la rodeaba como un gigantesco escudo viviente. La armadura negra de aspecto fiero que le acompañaba le resulto menos intimidatoria y dedicó unos segundos a mirarla. El visor del casco que normalmente refulgía con tonos verdosos se encontraba anormalmente apagado.
-¿Edward?- pronunció tímidamente.
El joven no se movió ni emitió sonido alguno. Su posición era rígida y el miedo inundó el cuerpo de Geera. Con un amargo sabor en la garganta apartó el brazo derecho de su cuerpo. Lentamente se deslizó de debajo de la armadura y no pudo contener un grito de terror. Con un sonoro estruendo la armadura se desplomaba al perder el punto de equilibrio. Sobre la cubierta del vehículo yacía el cuerpo de Ed, aun enfundado en su traje de combate.
Las puertas de la colonia se abrieron con urgencia ante la aparición del camión. Un grupo de ciudadanos asistió atónito al lamentable aspecto que presentaba. Numerosos impactos de energía habían deformado la puerta trasera hasta el punto de que poco después hubo de ser arrancada de sus goznes para poder abrirse. El edificio de la Corporación se encontraba bullendo en frenética actividad. Ingenieros y miembros del personal de seguridad corrían de lado a lado tratando de acondicionarlo todo. El camión entró en el patio exterior y las puertas se cerraron de par en par. Un grupo del personal sanitario, apoyado por unos cuantos obreros, bajo del techo el cuerpo inerte de Ed. Por su parte Geera fue envuelta en una manta y llevada al interior.
Desde una ventana, el jefe de sección observaba la escena con una sonrisa de satisfacción. El A-04 se encontraba en su poder y si respondía a las expectativas que el ejercito había creado a su alrededor, el coste había sido mínimo. La puerta de su despacho sonó tres veces. Un hombre vestido de blanco le anunció que Geera se encontraba en las instalaciones. Por su parte, Ed había sido conducido a un domo secundario en el que trataban de retirarle la coraza para ver que era del cuerpo del joven.
-¿Te encuentras bien?- le preguntó el jefe de sección a Geera, que en estos momentos entraba en la sala.
-No, mi hermano...- las palabras se atascaron, -no me lo puedo creer.
-Tranquila, ya ha pasado todo y la misión ha sido un éxito.
La muchacha ni siquiera escuchó este ultimo comentario. La imagen de su hermano apareció en sus pensamientos y la realidad la golpeó de nuevo.
-¿Y Edward?¿esta vivo?- preguntó de repente.
-No lo sabemos, pero en principio no da señales de vida.
En esos instantes hacía aparición en el hangar el contenedor del A-04. Flanqueado por un puñado de hombres y mujeres fue situado en el centro de la sala, muy cerca de la piscina. Tras introducir el código numérico en el panel de control, el liquido de su interior comenzó a salir al exterior por unas pequeñas oberturas laterales, empapando el suelo. De manera automática la puerta se abrió cuando termino la evacuación. Ante los ojos de todos se mostró el aspecto del experimento biológico.
Sujeto con unos arneses y envuelto en una especia de camisa de fuerza, un joven permanecía con los ojos cerrados. Su piel era más blanquecina de lo normal y llevaba la cabeza completamente rapada. Mantenía los ojos cerrados y la cabeza gacha. Dos operarios le extrajeron del contenedor utilizando una especie de montacargas. Ahora que se encontraba fuera no resultaba intimidante, más bien parecía un crío indefenso. El jefe de sección apareció por una puerta lateral que comunicaba con la sala en la que hasta hace unos minutos se encontraba con Geera.
-Excelente.
A una orden suya se soltaron los arneses del sujeto, que pese a todo permanecía con la camisa de fuerza puesta. Cayó hacia delante como un peso muerto aunque no perdió el equilibrio. Sus piernas se mantenían ligeramente flexionadas, pero no realizaba ningún movimiento. Era más parecido a una estatua que a una persona. El jefe de sección se acercó con cautela hasta colocarse a su altura. Ahora miraba directamente la cara del joven, serena, con gesto equilibrado.
-A-04, ¿me escuchas?- le preguntó el hombre.
Los ojos se abrieron con violencia, asustando incluso a muchos de los presentes. Apenas unos centímetros separaban los rostros de los dos hombres pero el jefe no apartó la mirada. Con las pupilas contraídas y el iris de color gris claro, resultaba todo un acto de valor devolverle la mirada.
Un medico irrumpió en la sala sin anunciarse, portaba una carpeta y parecía bastante alterado. Traía noticias sobre Ed. Se encontraba vivo, sus heridas eran graves pero la armadura le había evitado daños mayores y había sido hospitalizado de inmediato.
No está mal, pero que nada mal no señor. No se parece en absoluto a lo que había esperado y eso es bueno, una forma rápida y a la vez correcta de poner fin a la acción y le has añadido varios puntos que la harán más interesante en un futuro.

Notar solo una cosilla: ¿¿¿¿Por qué elegiste precisamente a Geera para salvarse ilesa ehhhhh????. Juas, si es que tos somos igualesXDXDXD.
Bueno, dejando a un lado las razones malpensadas que rondan tu retorcida cabezaXD, digamos que era necesario para el futuro desarrollo. Ademas el papel de Ed no se planteara como hasta ahora...
Pero que razones malpensadas ni que leches, me refería a que has dejado ilesa PRECISAMENTE a la chica, la has hecho llorar y en resumen, como casi to dios la has usado pa que diese penita porque sabías que un tío quedaría mucho más cutre en ese papelXDXDXD.
Ahora es cuando te cae un rayo en la cabeza[poraki]
Como siempre, me ha gustado especialmente, la accion está muy bien narrada y el posterior desarrollo tiene buena pinta.

Pero...... por qué coño has dicho que ED no estaba muerto?.... NO!!!!, tenias que habernos dejado sufrir un poco más. [snif]

Respecto a lo de la chica... que mania tiene cragor de meterse con las ideas de los demás, deja el chico GRUÑON!. XD

Taluego.
Asi que quereis sufrir??? bueno, tomo nota:)
Y a Cragor dejale, que bastante tiene con su personaje de Mel, ¿verdad?;)
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