Creo que los profesores están tomando represalias contra mi hermano...

Yo solo voy a decir una cosa.

No voy a entrar en la polémica de cómo actuó el profesorado ni tu hermano. Eso es peccata minuta.

El verdadero problema es que como tu hermano termino los estudios un año después, ahora tiene un x2 en competencia para encontrar un trabajo bien remunerado.

Quizás si hubiera terminado en el mismo año que la chica, podía haber conseguido primero un trabajo en el que si valoraran esas notas, aunque no es habitual que en los trabajos discriminen por notas.

Al perder ese año y haber entrado en polémica, legítima o no, si en un trabajo piden referencias a la universidad (que no lo suelen hacer) eso le puede restar bastantes puntos.

Pero aquí lo importante es que si se graduaron 100 el primer año y otros 100 el segundo, ahora tiene que competir contra 200 personas para encontrar trabajo.

En el trabajo rara vez te reconocen como "el mejor" y tampoco hay premios. Se trata de hacerlo todo lo mejor que puedas sin esperar reconocimiento por ello. De hecho, los que ascienden normalmente es porque también tienen buenas migas con todo el mundo, incluso con sus competidores.

Si tu hermano espera reconocimiento en su etapa laboral, lo pasará bastante mal porque lo de "empleado del mes" son medallas de tapa de yogur. Si se deja llevar por su orgullo hasta el punto de perder un año y extrapola esa actitud con el trabajo, va a tener problemas.

La vida no es justa y hay que aprenderlo lo más rápido posible, porque cuando te topas con este tipo de injusticias, cada uno va a defender sus propios intereses, no los tuyos. Y en el trabajo no hay profesores que seas "imparciales" (entre mucha comillas). Son otros trabajadores como tu, que quieren su propio beneficio. Los jefes también son competidores tuyos y si les resultas amenazantes en algún sentido en el que peligre su propio puesto, no van a ser cordiales.

A los pocos años de terminar la carrera, nadie se acuerda ya de si tuviste reconocimiento o mención honorifica y en los trabajos, puede ser importante (ya aviso que no) para conseguir un trabajo, pero una vez dentro, pasas a ser uno más y encima arrastras una expectativas muy altas. Pero a la que cambies a un segundo trabajo, lo que importa es la experiencia, no las notas.

El único ámbito donde las notas, menciones honoríficas y demás si que sirven, es en el ámbito académico. Si pretendes seguir una vida de docente o académico, entonces tienes más puertas abiertas porque te mantienes en el mismo mundo. Fuera de ahí, lo que importa es si en 8 horas haces 100 tornillos o solo 50, aunque esos 50 sean obras maestras solo van a ver que otro hace 100 y tu solo 50. Solo importa que tengan la calidad mínima requerida. Punto.
xDarkPeTruSx escribió:El verdadero problema es que como tu hermano termino los estudios un año después, ahora tiene un x2 en competencia para encontrar un trabajo bien remunerado.

Trabajo bien remunerado con hispánicas, jajaja.
A mí también me choca mucho la decisión de tu hermano y no me parece la mas madura, pero bueno, cosa suya. Es cierto que la gente que siempre ha sido la mejor le cuesta asumir que puede haber alguien mejor que él y me da la sensación de que este puede ser el caso. Y como digo, no es un gran símbolo de madurez, no, y esto es lo que pudo resultar decepcionante a sus profesores, que siendo un alumno brillante lo imaginarian más maduro en ese sentido (aunque en realidad son dos cosas que no tienen relación).
¿Con esto justifico que ahora le estén bajando las notas a drede si es que lo están haciendo? EN ABSOLUTO. Si podría decir que las decisiones tienen consecuencias positivas y negativas, y está, sea justa o no, es una negativa de su decisión.

Yo aquí el problema que le veo a tu hermano es que... bueno, es brillante en su campo, no lo dudo (no es que no lo dude, es que su expediente lo corrobora), pero su campo es la filología. Es un ámbito donde las principales salidas laborales están... pues básicamente en el mundo académico. Si tú hermano tiene pensado opositar a profesor de secundaria pues a aguantar este año y otra cosa, ahí no hay mucho problema por qué lo que cuenta son la nota del examen y los puntos del baremo, negro sobre blanco, pero si quiere estar más en el ámbito universitario... que no se haya hipotecado por un viaje a Italia. Esto es duro e injusto, pero mira, igual te sorprendería como funciona el mundo universitario, especialmente en carreras como las filologías, filosofía, ciencias políticas, etc, y hablo con experiencia (no propia, pero si muy directa de pareja y amigos de él). Gran parte del asunto de meter el pie de entrada tiene más que ver con los contactos y los padrinos que te vas haciendo que con el expediente académico, y si en tu universidad no quieren que entre, no lo va a tener nada fácil (y en otras universidades no lo va a tener bien por qué ya tendrán sus preferidos). Antes un compañero dijo que "el mundo académico es el único donde el expediente es lo que cuenta". Bueno, pues siento decir que no es lo único que cuenta en absoluto. Si a ti y a tu hermano os parece que hay injusticias por favoritismos con simples alumnos de carrera, vais a flipar entonces cuando le toque aplicar a una plaza en el claustro, la verdad xD No es un buen lugar al que intentar llegar haciendo enemigos por el camino. ¿Es un asco? Pues un poco, pero it is what it is.

Las consecuencias de haber puesto al claustro y, por lo que dices, a los órganos de gobierno de la facultad en su contra (pretendidamente o no, justamente o no, pero por lo que te leo de qué los tiene en contra hay cero dudas), y ojalá me equivoque, pueden ser más feas si quieres dedicarse al ámbito académico, si no, pues a acabar el máster y a otra cosa.

PD: Ni idea en esto, ¿de que sirve el premio por el que se lió todo esto? ¿Premio económico, la perspectiva de un viaje a Italia, palmaditas en la espalda... o al menos queda constancia en el expediente de alguna manera que al menos le pueda servir para que puedan tener en el futuro más complicado ponerle el pie en la puerta?
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