Buenas noches,
El título puede parecer absurdo, pues hay gente que ve como sus relaciones sentimentales acaban de forma desagradable, causando situaciones y dolor inimaginables para el que no lo experimenta, pero me explico:
No he detallado mejor porque el título no permite hacerlo. Lo que estoy viviendo es el fin de la relación con mi pareja de unos buenos años, con la cual he vivido una complicidad absoluta, amor sincero, relaciones íntimas inmejorables y una capacidad de aforntar problemas juntos perfecta.
Hemos acabado de forma amistosa y, básicamente, la causa principal ha sido nuestros entornos, los problemas que hemos arrastrado de fondo -de forma excesivamente constante- y que, por desgracia, no podíamos evitar porque había personas a cargo de por medio.
Ella ha sufrido una serie de situaciones -que no detallaré por respeto- que me han obligado desde el principio a ser quien lidiaba con todo. Ni su entorno ni el mío han cooperado lo más mínimo jamás y, con el paso de los años, ella ha acabado sintiéndome más su cuidador que su pareja. Llevaba mucho tiempo insistiéndome en que no quería esto para mí, que se sentía muy mal por ello, que sentía que me estaba jodiendo la vida...
Ella era una persona muy independiente antes de conocerme, pero rollo hardcore además, de las que salieron siempre adelante solas, a base de luchar, sin nadie. Y con todos los problemas, y conmigo intentando solucionar todo en lugar de disfrutar del tiempo juntos, como es deseable, ha acabado sintiendo una dependecia emocional muy fuerte hacia mí que le hacía sentir muy vulnerable, no se reconocía, pues literalmente acabó delegando en mí y sintiendo ansiedad cuando yo no estaba ahí. Perdió su independencia personal.
Al hablarlo, todo han sido palabras de agradecimiento, emoción por ambas partes -aunque mucho más por la mía, pues literalmente me rompí en varios momentos de la conversación- y esa promesa de estar uno para el otro en lo bueno y en lo malo, como ha sido siempre.
Cuando decía en el título "el dolor..." me refiero a que, en nuestro caso, es cortar una relación en la que hay respeto y amor hasta en el momento de cortar. En mi caso, estando enamorado de ella de la misma forma en que lo estaba al empezar. Aunque lógicamente me quedo con lo bueno por encima de todo, sé que me habría dolido mil veces menos que me dijese que me dejaba porque no le convenzo como hombre, que le gusta otro o cualquier otro motivo que me llevase a pensar: "ok, es tu decisión, yo reinicio de esto desde ya", no sé si me explico.
Me parece cruel tener que acabar algo con la que considero la mejor mujer que he conocido, con ella diciéndome que jamás se hubiese imaginado alguien tan leal, que la haya querido tanto y que no haya huido ante tanto problema... pues te destroza, al menos a mí, porque la conozco, sé que lo que dijo lo siente y con algo así te comes más la cabeza que si sabes que le has hecho daño a alguien aposta y tienes que asumir como adulto.
Y me destroza porque sé que su vida y su entorno le mostraron desde bien pequeña que en la vida se las tendría que apañar ella solita, que nadie le iba a echar una mano y, quizás por querer evitarle tanto problema, le hice 'perder' parte de la identidad que siempre le ayudó a tirar para delante.
Sin quererlo, transformé su vida y por desgracia le hice sentirse extraña. Con caricias y besos ante cualquier problema, sin una sola discusión en todos nuestros años juntos. Quizás cometí un error al no intentar jamás forzarla a reaccionar, pero me parecía cruel hacerlo, porque todo su entorno ya lo hace
... y yo sentía y siento que merecía ese esfuerzo extra, cuidarla lo mejor que sé.... y se tornó en sobreprotección.
Me torturo por esos fallos que he podido cometer, por aquello que quizás debí solucionar de otros modos.... no sé, es muy difícil.
Sólo escribo esto para ver si alguno de vosotr@s habéis vivido algo similar, el cortar con alguien de manera muy amistosa y sabiendo que, en otras circunstancias, seguramente la relación se mantendría. O cualquiera que quiera aportarme su punto de vista. Lo agradeceré mucho.
Perdón y gracias por leer la tochada y espero que se entienda bien lo que he querido expresar.
Y, por favor, pese a que no tengo mucho el cuerpo para bromas, no me importa un poco de humor, pero espero respuestas serias, no las típicas que parecen mostrar regocijo ante el dolor ajeno. Un saludo a todos.