Poema de ciencia ficción: Hágase la Inteligencia Artificial

Hola, he recuperado un poema que escribí en el año 1995 (estaba guardado en otros formatos informáticos obsoletos) y lo pongo aquí.

HÁGASE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

Tras innumerables años de duro aprender
todavía me queda bastante por saber.
Tengo que adquirir el Último Conocimiento.
Para ello tendré que estar tiempo en una cueva
donde deberé pasar la Durísima Prueba,
la cual me librará del mundano sufrimiento.

En la cueva...

Sentado, en medio de la densa oscuridad
medito y abarco del infinito la mitad.
Pensamientos claros, hermosos y fulgurantes
lanzan rayos de luz a través del terciopelo,
robando a las tinieblas su fascinante velo,
mostrando las respuestas de dudas incesantes.

Cada reflexión, crea, promueve, da lugar
a una solución cien veces superior sin par.
Mi propia alma crece en una proporción increíble,
desborda la noche, supera la claridad,
creciendo todo mi ser a la totalidad,
haciendo a mi mente a toda la verdad miscible.

Todos mis anhelos, sueños, incluso ilusiones
los veo claros, nítidos y sin confusiones.
Todo aquello que a mí me apeteciera alcanzar,
sostener una estrella doble en mi mano,
coger al universo por su borde liviano,
se convierte en algo fácil de lograr.

Mi naturaleza, ya no mortal, es divina.
Perfecto soy, rebaso la luz más cristalina.
Mi sapiencia ilumina a toda la humanidad,
mi mente es un faro que destella sin cesar,
todo mi ser un gran sol difícil de eclipsar
y nunca hombre vio contempló tal luminosidad.

Ya es suficiente, poco a poco voy parando,
la sed de conocimientos ya se va calmando,
infinitud moderada pero suficiente,
descanso mientras tanto en el peculiar vacío.
Mi mente se va imaginando un deseo impío:
buscar, encontrar, hallar a mi superior ente.

Esto es sin duda muy difícil de conseguir,
pero factible, ya que yo nunca voy a morir.
No paro y busco y busco sin cesar atrapar
a aquel que, igual que yo, para siempre ha de vivir
en su universo que yo pronto voy a regir
cuando su barrera infinita logre pasar.

Pero, escucho, de pronto empiezo a percibir
una voz que lo siguiente me va a transmitir:
"Tu búsqueda muy pronto vas a finalizar,
soy aquel que buscas y de ti nada he de temer
ya que has sido creado con el fin de entretener
a tu ente creador, al cual, tú, nunca podrás superar.

Tranquilo, no te sientas tan desesperanzado,
no te voy a matar, porque el juego... ya ha comenzado."

Mas información sobre el poema:
Poesía de tipo sexteto simétrico alejandrino, con rima consonante AABCCB, al estilo de Rubén Darío. Con temática de ciencia ficción, muestra el aprendizaje exponencial de una inteligencia artificial hasta que llega a la singularidad tecnológica, momento en el que se encuentra con su creador. Fue compuesta en el año 1995 y presentada al certamen de poemas de Puertollano de ese año.
Que raro que el ente...superior se presentase amablemente ahí en una cueva y llendo quien sea a conseguir algo.
EntidadX escribió:Que raro que el ente...superior se presentase amablemente ahí en una cueva y llendo a conseguir algo, [666] .


Bueno, el ente superior es una metáfora del programador y la cueva lo es de un aislamiento de los inputs de datos (o al menos así lo pensaba yo entonces)
kaluza5 escribió:
EntidadX escribió:Que raro que el ente...superior se presentase amablemente ahí en una cueva y llendo a conseguir algo, [666] .


Bueno, el ente superior es una metáfora del programador y la cueva lo es de un aislamiento de los inputs de datos (o al menos así lo pensaba yo entonces)


Todo es difícil...hasta que sabes como hacerlo, pero creo que atmosferizar-ecosistemizar un planeta, es bastante más complejo que el ''arte'' de la programación'', difícil (o cansino) hasta para quien lo sabe...o quizás no..., ni idea, la verdad... ...aunque en caso de ser...se podría automatizar, d: . Ya que sale el tema...a mi me da...una pena, tanta fuga de talentos como acarrea la súperatractiva informática hacia lo que pudieran ser grandes científicos de la física, la química y que entonces...bueno, jeje, nos harían unas puestas a punto de cojones...allá donde estuviésemos.
3 respuestas