hyrulewarriror escribió:Si son drogatas llama a la policia, en cuanto los pillen y se cosquen que haciendo esas actividades , los vecinos van a seguir llamando a la poli, se buscarán otro sitio para dar por saco.
Es que esa es precisamente la idea que preferimos evitar en general, poeque desee ensañarse con los alrededores del lugar después.
HetsR escribió:Bájate con ellos y que te inviten a un par de tirines. YOLO.
Por mi apariencia seguro que me piden hasta más mercancía. No sería la primera vez

Nuku nuku escribió:Si dices que estan drogandose, policia y fiesta, mira si son un grupo de chavales que no hacen mas que hablar, pero nada mas, pues si, se puede intentar ir de buenas y demas, pero si hablamos de yonkis entonces, aparte de que poco vas a poder hablar con ellos seguramente, es que son un peligro, no ya ellos mismos drogados, es que vale, se meten rayas, pero ¿y si se metieran picos? ¿y si los picos se quedasen en el cesped? ¿y si esos culos agradecidos de la hierba mojadita se sienta encima de un pico y se pincha?.
Mi calle era de paso a una zona de marcha de la ciudad, todos los sabados era una constante de borrachos, patadas a cubos etc, nosotros jugabamos en esa calle ya que hay unos porches y hay mucho espacio, y un dia nos encontramos una jeringuilla de uno que se estuvo chutando, si eso ya nos valio para que no nos dejaran bajar a jugar alli durante un tiempo "por si acaso", no me puedo imaginar si hubiera una constante.
Es una sola persona. A mí que se drogue de esa forma me parece que sólo le viene mal a dicha energúmena y como mucho a algunos de su entorno. Por suerte a los pinchos no llega. Lo que de verdad molesta es ESA odiosa voz a las tantas de la madrugada, pero suerte de tapones. Hoy se ha traído a lo que espero que sean los sobrinitos (que no adeptos), qué lindos y entrañables. Lo mejor de todo es que ellos sí respetan el nivel de ruido a esas horas de la madrugada.
La historia que cuentas es la triste realidad. Parece mentira la de peña que le da a los tiros y a los picos todavía a día de hoy, pudiendo invertir en muchos otros vicios que hasta pueden llegar a ser productivos.
Lo que me sorprendió una vez fue un grupo de chavales, que hasta se llevaron una báscula electrónica para repartirse y vender la "weed". Miraban todos alrededor en busca de obstáculos policiales, pero lo gracioso es que ninguno mira para arriba, hacia las ventanas.
En fin, espero que esa persona haya pasado por su época mala y se esté rehabilitando, que la vida le vaya mejor y gane más en educación para que la peña no le lance cacas de perro