El USB 2.0 en la práctica podría darte unos 240-320 Mbps (teóricos son 480 Mbps). Si la conexión es de 300Mbps probablemente no le lleguen los 300Mbps donde esté el equipo, así que en teoría ganarías poco o nada con USB 3.0.
De todas formas, ya que lo tienes instalado en un equipo puedes ver qué velocidad te está llegando. Y con otro dispositivo wifi (móvil, p.ej.) podrías ver la velocidad que llega a ese mismo punto por hacer una estimación burda de si el USB 2.0 está siendo cuello de botella o no.