RIMA XXXI

No te olvides de una cosa,
mientras la muerte te espera
y el tiempo te ve pasar,
te observas las cicatrices
y sabes que no volverá...


No me he ido de Erasmus
no he ido a la universidad
no he conseguido muchos sueños
y otros los tuve que cambiar.

No he sido tuno ni juez,
tampoco he sido abogado,
ni dibujante de cómics
y casi ni he viajado.

No he salido de Europa,
Japón aún ni lo he pisado,
no sé cuando tendré un hijo,
si tan siquiera me he casado.

Y tú mi musa maldita
aquella que tanto anhelé,
tras una década perdida
prefiero seguirte sin ver.

Comparto mi vida con alguien
mi alma gemela
(tal vez?)
el destino parece que sí
tantos encuentros fortuitos,
casualidad no pueden ser.

Aquí andamos toda mi vida
EOL mi vió nacer,
mis primeras letras de poesía,
mi poemario sin papel.
@dant3

Como poeta publicado, te aconsejo que dejes de lado esa influencia bequeriana y te olvides de la rima.

Hace cien años que la rima pasó a mejor vida.

Deja de cantar, aunque sigue atendiendo a la musicalidad del poema, ten siempre atento el oído, y empieza a darle contenido y forma a tus poemas desde la madurez semántica. Explora otros caminos. Dede Vallejo hasta Bukowski, Desde Rilke hasta Caballero Bonald.

Sal de la adolescencia lírica. Lárgate del instituto y empieza a escribir de verdad.
Tagx escribió:@dant3

Como poeta publicado, te aconsejo que dejes de lado esa influencia bequeriana y te olvides de la rima.

Hace cien años que la rima pasó a mejor vida.

Deja de cantar, aunque sigue atendiendo a la musicalidad del poema, ten siempre atento el oído, y empieza a darle contenido y forma a tus poemas desde la madurez semántica. Explora otros caminos. Dede Vallejo hasta Bukowski, Desde Rilke hasta Caballero Bonald.

Sal de la adolescencia lírica. Lárgate del instituto y empieza a escribir de verdad.

@Tagx
Como poeta "aficionado" a poeta publicado:

Me encantó y me encanta Gustavo Adolfo Béquer; he leído a nuestro querido Hank, obvimente Miguel Hernandez, Lorca, Rosalia de Castro, Benedetti, las Eddas, Delives, Góngora, además de otros tantos que usted ya conocerá.

Agradezco sus consejos (no se crea), y es bien recibido todo cumplido o patada en los ovoides.
Y recibo como un halago lo de echarme menos edad -mental, se entiende-, puesto que ya me “largué” del instituto unos cuantos quinquenios atrás.
Por lo que veo, ambos, usted y yo, cabalgamos en la misma década vital y podríamos o deberíamos ser ya padres.

Lamento encarecidamente que mi rima no haya cumplido sus expectativas y parecierale que llevo un siglo de retraso.

Por último, le pediría fervientemente que me dé referencia de alguna de sus obras publicadas para que pueda suplir carencia y supla mi adolescencia lírica.

Muchas gracias por leerme y remitirme sus palabras, intentaré seguir sus consejos.
Un fuerte saludo compañero de letras!


Pd. La rima me encanta y desgraciadamente, no creo que la deje nunca.
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