Hombre, las ruedas de Max estaban muy frescas, sí, pero no se puede menospreciar el remontadón que hizo desde su última parada hasta el final. La impresión que daba era como si estuviera jugando a un videojuego en modo de dificultad fácil contra rivales medio mancos. Y, evidentemente, los pilotos de F1 no son medio mancos. De hecho, creo que Red Bull ayer perjudicó a sus pilotos haciéndoles entrar para poner intermedios, porque de no haberlo hecho Max habría quedado segundo.
Ayer, sin duda, Max fue el mejor en la pista. Y de largo. Igual que otros días hay que criticarle porque toma decisiones bastante malas, ayer demostró lo gran piloto que es. Alonso se le acercaba ayer en cuanto a rendimiento hasta que trompeó cuando se iba el último coche de seguridad. La remontada posterior también fue impresionante, aunque no la viésemos, pero eso le costó unos cuantos puntos, son los típicos errores que cometes cuando no te juegas nada.