Muchas gracias por los comentarios, me hacen ver puntos de vista que no había tenido en cuenta.
Bueno, en realidad yo no le he dicho que me quiera ir, os explico un poco la situacion, el tema es que estoy contento con el trabajo en sí y con lo que hago, le dedico muchísimas horas y disfruto con ello.
Cuando las cosas van bien, mi jefa me lo reconoce y todo es de color de rosa, pero cuando la cago en algo, de repente de la noche a la mañana todo son quejas y de color de negro.
Y el otro día llegó a un punto en que me soltó que no mereceía el sueldo que me pagaba, que otros compañeros (que llevan mas tiempo que yo desarrollando) lo hacen mejor (yo tengo más experiencia con la herramienta pero no con el desarrollo) y por menos sueldo, y claro, eso me sento como un tiro.
A lo que le mandé un mail diciéndole que no me parecía correcta la forma en la que se había expresado, y que no podía tolerar más conversaciones fuera de tono, que para todo hay unas formas de hablar y hacer ver las cosas.
También le dije claramente que si la empresa considera que no soy merecedor del sueldo que me paga, la solución es fácil. Que yo esperaba que no fuera este el caso, pero que el hecho de que un día todo sea perfecto y al día siguiente todo sea un desastre me desconcierta y no sé en qué punto está la relación, por lo que, en aras de aclarar la situación, se lo piense y me diga qué es lo que quiere o cuáles son sus intenciones.
Y bueno, que tampoco quiero ser una carga para la empresa, pero que estoy contento con mi trabajo y con lo que hago, eso también se lo he dejado claro.
Pero las formas que tiene cuando se cabrea, debe de cambiarlas porque no puedo tolerar frases como la que me soltó (y sé que con el tiempo, se repetirá la situación, porque ella es así.
Quizá sea porque es una empresa pequeña, yo estoy acostumbrado a las multinacionales donde nadie en ningún momento te trata de esta forma (de hecho esta es la primera vez que curro en una pequeña empresa)
La multinacional donde curraba antes y tengo el paro máximo acumulado, fue baja voluntaria pactada, porque a la empresa no le interesaba entrar en ERE por temas de publicidad, y acordamos una salida "amistosa" a cambio de una mayor compensación.