Yo primero abriría el portátil y comprobaría qué tipo de disco duro lleva, no vaya a ser que, dado el caso, tu portátil lleve disco duro PATA, y el externo que vayas a pillar sea SATA, con lo que no habría nada que rascar...
Si el disco del portátil y el externo llevan el mismo interfaz (ambos PATA o ambos SATA) entonces puedes cambiarlo sin problema...