No se si te va a valer la respuesta, pero en la constructora en la que yo trabajaba teníamos un problema parecido. La solución fue asignarle una cámara a cada uno de los encargados personalmente en lugar de que fuera la cámara "De la obra", y decirles que la podían utilizar para uso personal, y que cada 2 años se la renovábamos. A cambio, si la cámara se estropeaba debido al mal uso o se "extraviaba" (Cosa que curiosamente pasaba muchas veces), se le descontaría de la nómina. Mano de santo oiga!. En los dos años siguientes no desapareció ni una sola, y las dos únicas que se estropearon se las cambiamos a los encargados sin penalización. (Para que te hagas una idea, antes teníamos que renovar las cámaras de fotos cada 6 meses).
Una solución menos drástica sería buscar alguna cámara barateja a la que se le pudiera colocar una funda de silicona o algo similar.
Te lo digo porque, efectivamente, existen cámaras resistentes al agua, al polvo y demás... pero las realmente resistentes a los elementos no son precisamente baratas, y si... resisten polvo, gotas, pequeños golpes... pero no están preparadas para tener dueños a los que no les importa una mierda lo que le pase a la cámara porque no es suya. De eso me temo que no hay.