Buenas a todos,
Entre pitos y flautas, llevo unos ocho años trabajando con Microsoft al nivel de cualquier otra pequeña tienda de informática de España. Es decir, intentado honradamente que todos cumplamos con sus acuerdos de licencia (aun cuando haya cláusulas "sospechosas) y legalidad acorde al tiempo que tratamos que no nos empapelen por aquello de ponerle un Windows o un Office pirata al primero que llega. Que todos hemos ido a convenciones y conferencias ("call-in meeetings" que les dicen ahora) donde hemos conocido a empleados de Microsoft muy guayses que nos han dado su tarjeta y nos han asegurado que estaban ahí para lo que necesitáramos en un momento dado, o para que supiéramos que hay humanos tras el telón de acero.
Hace poco, un cliente nos puso una reclamación ante la OMIC aduciendo que el Windows que le dimos era pirata. Que la licencia que posee es más genuina y posee más métodos de verificación que un billete de cincuenta euros es tema de otro post, y de cómo se puede llegar a esa situación. De cómo le solicitamos una sencilla asistencia de Microsoft y logramos no una, ni dos, sino tres visitas seguidas de "inspectores" y de "mystery shoppers" que llamaban continuamente a nuestro comercio solicitando que les vendiéramos "Güindos oen, licencias de las baratas" sin comprar un equipo nuevo, y de cómo la política de Microsoft es puramente recaudatoria, también es tema de un post. Todo eso en lugar de facilitarnos una simple hoja de ayuda a la activación, por cierto.
Pero es que hoy lo he sufrido en carnes, y eso siempre duele más. Tras mi reciente instalación de un SSD Intel de 120GB he reinstalado el SO (puesto que no tengo nada importante en un disco duro de arranque, nunca hago Ghosts ni Acronis, siemrpe formateo y reinstalo: total, los drivers y programas ya se habrán quedado desfasados) y mi licencia OEM impoluta de Windows 7 Ultimate me dice que se haya bloqueada por Microsoft al realizar la activación online. La telefónica me dice que la clave probablemente no sea genuina, a lo que flipo. Desde Windows 3.1 pasando por NT 3.51, Windows 95, Windows 98, Windows ME, Windows 2000, Windows XP, Vista... tengo una hermosa colección de licencias, COAS, EULAS y pollas de Microsoft.
Contacto con el soporte en línea y tras dos rebotes, acabo con un operador del servicio de activación. Años de experiencia me dicen dónde acabaré, pero eso es algo que ya conozco, y continúo resignadamente esperando que tal vez halle una respuesta. Tras varios mareos e intentos infructuosos de cambiar el Id. de instalación (que no cambia a no ser que modifiques la clave de producto porporcionada en un hardware específico) el operador visiblemente cansado me remite al sitio web de
http://support.microsoft.com donde asegura hallaré una respuesta ignorando mis réplicas de que vengo precisamente de ese sitio web. Sitio web en el que intento tramitar una asistencia online, aun de cobro, con Microsoft y se niega porque "el soporte técnico del software OEM lo proporciona directamente el ensalmblador del equipo". Nueva conversación telefónica (a un 902, of course) y nueva decepción. ¿Cómo no va a irse la gente corriendo a un Mac, que es a lo único que teme Microsoft descartado el tema Linux?
El resultado ha sido doble: por un lado he vuelto a la tienda y he tramitado devolución de las licencias de 7 Starter, Home Premium y Professional amén de los Offices SBS y Hogar y Estudiantes. El resultado es que todos los equipos, a partir de ahora, salen con Ubuntu o con Windows evaluación de 30 días, LibreOffice y demás historias; porque para algo soy el que los monta y los configura. Por otra vertiente, en lugar de coger una licencia Retail de Windows 7, he encargado un Mac, así con un par de cojones; a ver qué pasa.
Si no puedo creer en algo, tampoco puedo venderlo. Y este post en parte es un desahogo pero si esto me lo llega a contar un cliente esta misma tarde después de perder infructuosamente tres horas con el teléfono ¿con qué cara le vendo al siguiente un ordenador con Windows?