No creo que lo sepan ni los que han redactado la ley. Están surgiendo multitud de problemas que nadie se había siquiera imaginado que se pudieran dar cuando se pensó en la ley y que se van solucionando a base de improvisación sobre la marcha. Por ejemplo: si está prohibido fumar en los centros de trabajo, ¿qué ocurre con los camareros de los bares de fumadores? La respuesta es tan demencial como ridícula, los camareros no pueden fumar, pero los clientes se pueden poner hasta el culo de nicotina y de paso intoxicar a los currelas del bar.
En fin, supongo que con el tiempo se irán puliendo muchas cosas, pero hay algunas situaciones que no hay por dónde cogerlas.