Daudén Ibañez, no es que sea un árbitro que considere "bueno", pero lo de quitarle la internacionalidad así porque sí, es de una indecencia intolerable.
Pero de ésto, la culpa la tienen también los propios árbitros que votaron a villar como subnormales, y que son incapaces de protestar ni de levantar la voz.
Si los árbitros de la LFP fueran profesionales (se entiende por profesional que se dediquen en exclusiva al arbitraje), y dependiesen de la LFP, otro gallo nos cantaría.
Pero en fin...