Según cuenta la leyenda, en la democracia el poder emana del pueblo. Una vez emanado, eso si, queda en manos de unos señoresque lo manosean y juegan con éldurante años mientras el pueblo se pregunta qué fue de su poder, cómo fue q lo regalaron, qué formal parecía el señor aquel de la corbata elegante y la mirada corajuda que terminó que terminó apuñanalandolos a todos por la espalda.
!Que alegría la nuestra cuando el sistema sufre su periódica arcada y nos devuelve el poder durante unas poquitas horas para que lo subastemos de nuevo¡
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Fuente: El Víbora.
