Muchísimas gracias a todos. Lamentablemente, después de poner el mensaje, Indy se ha derrumbado, ha entrado en estado de shock y ha muerto entre mis brazos a los pocos minutos. Se me ha ido sin avisar mi mejor amigo desde los trece años, y aún no sé por qué. Así, sin más. El momento que tanto he temido desde que era un criajo ha llegado y no me ha dado tiempo a hacerme a la idea: no digo que quisiera que sufriese una larga enfermedad, pero habría preferido algo que se viese venir. Sólo pedía un día. Si esta mañana hubiese sabido que Indy iba a morir esta noche, habría cancelado mis clases y habría pasado con él todo el día. Habríamos ido al río de mi pueblo, su lugar favorito, nos habríamos hecho fotos, le habría hablado de mis planes de futuro (él habría fingido entenderme) y habríamos peleado por un palo. Solos él y yo. Como en aquel capítulo de Los Simpson. Con lo gruñón que era, y esta noche no se ha quejado ni en un solo momento. Simplemente he oído un gemido ahogado al otro lado de la puerta de mi cuarto, lo he sacado a la calle un momento y me he dado cuenta de que tenía el vientre abultadísimo. Si no lo hubiese oído, Indy habría muerto solo.
Le he dicho a mi madre que quiero pensarme esta noche qué hacer con su cuerpo, no me decido entre autopsia o enterrarlo en un terreno que tenemos cerca del río en cuanto salga el sol (la opción legal queda descartada por obvios motivos sentimentaloides). Por un lado nada me va a devolver a mi peludillo, pero por otro no quiero quedarme con la duda de qué mató a mi perro, y menos si ese "qué" resulta ser un "quién".
En fin, que yo y el vacío en mi habitación nos despedimos. Indy nunca leerá este mensaje, y desgraciadamente a todos nos pasan estas cosas, así que ya entenderéis lo que siento en este momento sin que haga falta decir mucho más. En fin, buenas noches a todos. Me voy a la cama a llorar como un gilipollas.
