Los primeros que se me vienen a la mente son dos clásicos británicos forjados en el teatro: Laurence Olivier y Alec Guinness. Pero si tienen que ser americanos, siempre me fascinó cómo Henry Fonda era capaz de hacer igual de bien al tipo honrado ejemplar y al villano más diabólico. Aunque otra forma de entender camaleónico sería alguien capaz de ser top en drama y también en vis cómica, algo que no es fácil de encontrar. En este sentido se me ocurre Jack Lemmon. Otro actor que me parecía completísimo, bueno en drama, bueno en comedia, capaz de hacer muy diferentes personajes, era Kirk Douglas.