Nunca hay suficientes escalones (ni actualizaciones) en la gama Snapdragon, aunque afortunadamente ahora están siendo mucho más lineales y fáciles de comprender que antaño. Así, si hace relativamente poco Qualcomm lanzó el
Snapdragon 8 Gen 2 como actualización generacional al exitoso Snapdragon 8 Gen 1, ahora llega el nuevo Snapdragon 7+ Gen 2, un
chipset orientado a los teléfonos de gama media-alta y con un extra de rendimiento gráfico para posicionarlo mejor dentro del segmento gaming. Resulta curioso el detalle de que llegue antes la versión "Plus" que la básica.
Cuestiones de calendario aparte, el Snapdragon 7+ Gen 2 aparenta ser un
chipset muy interesante, con prestaciones elevadas dentro de su particular espacio. La CPU posee un familiar diseño heterogéneo de ocho núcleos, con cuatro Cortex-A510 de alta eficiencia y tres Cortex-A710 intermedios, todos ellos aproximadamente a las mismas velocidades que en la generación anterior, pero ahora hay un núcleo de alto rendimiento Cortex-X2. Con una velocidad de reloj de 2,91 GHz, supuestamente mejora el rendimiento general nada menos que un 50 % con respecto al Snapdragon 7 Gen 1.
En un principio estamos hablando de una cantidad de potencia lo suficientemente grande como para solaparse con la de algunos buques insignia, pero hay un detalle a considerar: al solo variar el núcleo de mayor rendimiento, las máximas prestaciones solo se obtienen en labores que requieren un único hilo de procesamiento.
La GPU también es interesante, aunque tal vez la palabra "misteriosa" se ajusta más a la realidad. Qualcomm no ha facilitado información técnica de ninguna clase, aunque sabemos que utiliza un diseño Adreno que duplica el rendimiento de la unidad de procesamiento gráfica integrada en el Snapdragon 7 Gen 1. A pesar de esta enorme mejora, muy superior a lo esperable en el típico salto generacional, Qualcomm declara que su nuevo
chipset brinda una mejora de eficiencia general del 13 %.
El resto de las características técnicas no varían de forma especialmente llamativa. Repite el soporte para memoria LPDDR5 a 3,2 GHz y las cámaras se mejoran ligeramente con ISP que admite algo más de resolución; hasta 200 MP como máximo teórico usando un único sensor y vídeo 4K60 con color de 10 bits. En cuanto al proceso de fabricación, sigue siendo a 4 nm, pero Qualcomm ha migrado al proceso de TSMC, cuando antes usaba el de Samsung.
El propósito de Qualcomm es competir más directamente con MediaTek, que se está haciendo un hueco importante entre los fabricantes chinos con sus
chipsets de gama media pero con gráficos potentes, muy del gusto asiático. En cuanto a la disponibilidad, parece que los primeros dispositivos ya están a la vuelta de la esquina, puesto que la firma estadounidense señala que Redmi y Realme preparan anuncios para este mismo mes.
Fuente: Qualcomm 
