Otro de los factores que se tienen en cuenta es la ocupación de un vuelo. Un vuelo con un una ocupación por debajo de un determinado porcentaje, supone perdidas para la compañia.
Por esto, si una compañia cubre un trayecto diariamente, y por ejemplo, el Martes hay pocos billetes vendidos y el resto de días muchos, el del Martes bajará de precio y los otros subirán, para tratar de llenar el vuelo del martes.