El minorista británico de videojuegos Game se ha puesto a la venta en un intento por conseguir el dinero necesario con el que pagar una factura de alquiler trimestral que vence en 15 días, según ha informado el diario The Sunday Times.
El periódico ha confirmado que se había designado a Rothschild para que buscara un comprador. Otro fracaso a la hora de pagar a los arrendadores podría situar a Game en administración concursal y el periódico afirmó que se había incluido a Deloitte para resolver cualquier proceso de insolvencia.
The Sunday Times, citando fuentes, informó que venderlo en tan corto período de tiempo "podría ser un problema". Sin embargo, hay expectativas de que la división española del grupo podría atraer el interés de su rival estadounidense GameStop.
Game tiene más de 1.270 tiendas en nueve países europeos y Australia. El grupo, que afronta una intensa competencia por parte de Internet y los supermercados, aumentó sus esperanzas de sobrevivir el mes pasado cuando llegó a un acuerdo para revisar los términos de préstamo con sus banqueros.
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