Tema de debate sin duda alguna, interesante. En mi caso, dependiendo de que tipo de productos y precio, opto por pequeño comercio o internet.
La
comida mayormente la compro en supermercados (que no creo que se consideren pequeño comercio), en parte por algo tan simple como no ir a cincuenta sitios. Si voy a una tienda pequeña a comprar la fruta, a otra el pescado, a otra la carne, a otra las patatas, a otra las bebidas... Invierto toda la tarde en hacer compras y como seguramente os pase a muchos, a veces uno tiene el tiempo justo (porque tiene otras compras o actividades que realizar esa tarde), por tanto uno acaba yendo a un supermercado para conseguir todo lo que necesita. No compro por Internet en este caso porque prefiero ver los alimentos y evaluar por mi mismo cuales prefiero adquirir.
En cuanto a
ropa y calzado, me gusta más acudir al pequeño negocio, tener la oportunidad de ver la prenda, probarla, etc. Eso es algo que con Internet es imposible hacer, tu puedes ver una prenda que aparentemente en la fotografía luce bien pero al verla en persona, no dispone de tanto atractivo. O que esa prenda en concreto talle de manera distinta a otra y aunque suelas ponerte un M, concretamente esa marca talla más pequeño y necesitas una L. Y finalmente la comodidad es algo que no se puede evaluar online. ¿Cómo compras unos vaqueros online? A no ser que sea la misma marca y talla que ya tienes, lo veo difícil. Que igual soy el único al que le pasa, pero a veces tengo probados pantalones que por talla son los adecuados, pero luego igual tiene el tiro demasiado alto y me incomodan al caminar. ¿Cómo mides eso al comprar por internet? No puedes. Por tanto, antes que ponerme a comprar en Internet y tener que estar cambiando y devolviendo hasta encontrar lo que necesito, prefiero ir a una tienda, un pequeño comercio y probar hasta encontrar lo que necesito. Y normalmente pequeños comercios de ropa están regentados por gente que tiene cierta experiencia y te puede aconsejar bien.
Papelería, pequeño comercio siempre. No hay apenas diferencia de precio (e incluso más barato en papelería) y apoyas al pequeño comerciante. Además, raro es que no tengan en el momento lo que necesitas (mientras que con Internet, tienes que esperar a que te lo envíen).
Librería (libros, cómics, mangas, revistas, etc), casi siempre pequeño comercio, excepto cuando quiero adquirir ediciones extranjeras inglesas (las cuales mayoritariamente no trabajan las librerías, cosa lógica por otro lado, ya que su público potencial es reducido) o hay ofertas imbatibles en Internet contras las cuales no puede competir el pequeño comercio fruto de la famosa ley del 5% (que una cosa es que apoyar al pequeño comercio y otra que en ocasiones puedas ahorrar hasta la mitad online. A nadie le sobra al dinero
![carcajada [carcajad]](/images/smilies/nuevos/risa_ani2.gif)
)
El pequeño comercio en este caso me brinda la posibilidad de ver in situ como son las ediciones, ojearlas, descubrir nuevas obras que puedan ser de mi agrado, algo que con Internet no es tan factible, porque fruto de su densidad, es más difícil hacer esa inspección. En una librería, hay un catalogo escogido y seleccionado, en Internet está todo, por tanto te "pierdes" a la hora de mirar opciones. Básicamente quiero decir que es más fácil descubrir una nueva obra en una librería que en Internet, que se "pierde" entre la marea de títulos disponibles. Además en Internet no puedes ver como es la edición de rigor (¿está bien encuadernada? ¿la maquetación es buena? ¿y la traducción?).
Videojuegos no recuerdo la última vez que compré uno en un pequeño comercio. Entre Internet y grandes superficies, puedes encontrar ofertas que difícilmente puede siquiera tratar de igualar un pequeño comercio. Además, es un mercado donde pocos comercios pequeños pueden aspirar a entrar, ya que la competencia es bastante dura (un pequeño comerciante no puede permitirse el lujo de rebajar un juego a la mitad de precio al mes de lanzamiento, algo que si puede hacer por ejemplo Carrefour si lo considera, como sucedió con The Last Guardian). Además para aquellos que buscan títulos retro muy concreto... Seguramente ebay o wallapop sean opciones preferentes.
El resumen es que hay productos para los cuales prefiero verlos in situ, ojearlos, inspeccionarlos, probarlos. Llamarme "romántico"
Internet ofrece la posibilidad de adquirir productos que antes serían muy difíciles de obtener por otros medios y con una rapidez y comodidad innegables. Pero considero que Internet no sirve para comprar todo, que hay productos que necesitas ver en persona. Y a igualdad de precio, ¿que me importa esperar unos días a que llegue el producto que demando a la tienda de rigor? No tengo problemas de paciencia.
accanijo escribió:Por cierto, gente que cuando no hay pago con tarjeta compra menos y cuando le das esa posibilidad en vez de 10 se gastan 40, ahí también esta el aumento de ingresos, yo suelo ir con el efectivo justo, y si no puedo comprar con tarjeta compro lo imprescindible, cuando me dan esa posibilidad a veces pico en mucho mas.
Es cierto que el dinero físico
@accanijo , incentiva a que controles más el gasto, porque básicamente puedes gastar como máximo, lo que tienes en la cartera. En cambio la tarjeta incentiva más los gastos impulsivos, porque no hay un mecanismo físico (sacar los billetes e ir contándolos) donde aprecies de manera directa el gasto que estás realizando. Con la tarjeta es más un "ya se encargará mi yo del mañana de evaluar dicha adquisición"
![carcajada [carcajad]](/images/smilies/nuevos/risa_ani2.gif)
Yo en ese sentido también soy "romántico" y prefiero pagar en metálico. Pagar con tarjeta es un acto más frío, como sino le dieras tanto valor al dinero, mientras que en físico eres más consciente de dicho acto.
Curiosamente en mi caso, sucede al contrario de lo que expones, si hay un negocio que sólo deja pagar con tarjeta, lo descarto. No quiero que me obliguen a sólo un método de pago, brinda opciones y que sea yo el que escoja cual prefiero.
Findeton escribió:No pagar impuesto no es ser un chorizo. Es no querer que un chorizo (el Estado/Rey) te robe.
La próxima vez que vayas al médico o un hospital, espero que pagues al contado dicho servicio. Espero que de paso, pagues con carácter retroactivo lo que costó tu educación pública obligatoria.
Y espero, que si algún familiar o ser cercano enferme, no pretendas que el estado costee su tratamiento y recuperación...