Bajo el soplo de la soledad
que tus ojos me cuentan,
en el intento por vivir la condena
de los que están condenados,
tu alma lucha en el día
por salir adelante
mientras de noche, tu rostro
engendra una flor de estrellas...
Cada pétalo de aquella flor
es un amigo que espera...
Algunos tan lejos que de solo
pensarlo
se quedan más cerca...
Y en tus manos crece despacio
la veloz primavera...
Como tan fácil te pienso
más fácil te aprecio,
y bajo el tiempo que tarda
en crecer esa flor,
sobre la luz del otoño
donde caen las hojas,
estos pétalos se quedan
para abrazarte en las sombras...
Flor de estrellas...
en tu vientre tendido...