- Factura de compra (con fecha, si aún tiene garantía, etc). La excusa de que no tiene factura porque es un regalo a mí me mosquearía de entrada, en según qué casos.
- Preguntar de todo: qué usos ha tenido, quien lo ha usado, si se ha movido mucho, cómo lo ha transporado, ... y observar cómo responde. Si no te inspira confianza o notas algo extraño, es mejor pasar y pillar otra cosa.
En cuanto al equipo en sí:
- La batería... Si no ha cuidado los ciclos de carga, puede estar más seca que la mojama y no aguantar ni una hora.
- La pantalla: píxeles muertos molestos, rayotes o desperfectos visibles, ...
- Teclado: desperfectos, teclas saltadas o con el recorrido defectuoso
- Extras: cargador y conexiones en buen estado, bolsa de transporte, ...
- ¿Discos y memorias originales o reemplazados por otros?
etc
Un saludo
PD/ Francamente, con los precios actuales y lo mal que suele tratar la gente sus equipos, un portátil es de esas cosas que yo jamás compraría de segunda mano, a menos que sea alguien de mi entorno, de total confianza y a quien pueda comentarle abiertamente cualquier problema, con la certeza de que podremos solucionarlo.