Hola compañeros.
Estoy planteándome la compra de un "segundo" PC para el salón, y la verdad que por estética y comodidad a la hora de conectar mis Oculus Rift (viene con conexiones delanteras para las gafas de VR), me he fijado en el MSI Trident.
Ya sé que en este tipo de ordenadores se paga un "plus" del precio final respecto a los componentes, digamos, por separado. Pero la verdad es que por las dimensiones y a como lo quiero enfocar este PC (exclusivamente para jugar en el salón) estaría dispuesto a pagar ese plus.
Al grano, estoy dudando entre las dos versiones que hay a la venta.
Las especificaciones que los diferencian son, en el caso del más "económico":
Procesador Intel® Core i5-7400 (3 GHz hasta 3.5Ghz)
Memoria RAM 8GB DDR4 SODIMM
Disco duro 1TB (5400 rpm S-ATA) + 128GB SSD M.2
Controlador gráfico Nvidia GeForce GTX 1060 3GB GDDR5
Precio: 1199€
Las especificaciones del más "caro" o "completo":
Procesador Intel® Core i7-7700 (3.6 GHz hasta 4.2Ghz)
Memoria RAM 16GB DDR4 SODIMM
Disco duro 1TB (5400 rpm S-ATA) + 256GB SSD M.2
Controlador gráfico Nvidia GeForce GTX 1060 6GB GDDR5
Precio: 1649€
¿Vale la pena pagar el sobreprecio (unos 450€) por el salto de procesador (i5 7400 vs i7 7700), el doble de RAM (8 vs 16) y los 3GB de diferencia de Vram en la gráfica (3GB vs 6GB)?
¿Hasta que punto puede mejorar el rendimiento en cuanto a FPS entre uno y otro?