Si la condición de transexual era "secreta" (en la medida en que eso sea posible, que no lo creo) se puede considerar una intromisión ilícita en la vida personal, pero aún así, seria como enfadarse por revelar que alguien va a misa (también es vulnerar la intimidad de una persona en cuanto a sus sentimientos religiosos) o que votaste al PSOE o al PP (seria revelar datos sobre ideología política) o que te operaste de una pierna (sería revelar datos sanitarios)
Pongo un ejemplo de cómo una persona inocentemente "vulnera" la intimidad personal de otro: la señora Amalia le pregunta a don Fernando, por qué su amigo común Marcial no fue a misa el pasado domingo. Si Fernando contesta revelando la razón por la que Marcial no fue a misa ese día, está dando información que corresponde a la privacidad, a la libertad religiosa de una persona. No debería decir nada. Lo mejor sería contestar: pregúntale tú a él. SIn embargo, no creo que la gente sea consciente que dar ese tipo de informaciones supone meterse en la libertad religiosa y privacidad de los demás.
A mí una vez me pasó que traté como "señora" a una persona por teléfono y resulta que era un "señor": Cuando me lo dijo me disculpé, porque el tono de voz me pareció femenino. Seguramente era un transexual o un hombre cuya voz por la razón que sea, por teléfono, parecía la de una mujer.
Habría que averiguar cómo se enteró esa persona del "dato" y si accedió a esa información vulnerando la privacidad de esa persona, por ejemplo registrando sus papeles o sus objetos personales. Si simplemente se dio cuenta del hecho -creo que es casi imposible ocultar la transexualidad, por lo menos a las personas con las que se tiene trato frecuente- la anécdota queda en que esa señora es una maleducada y una entrometida, pero poco más, a menos que insista en esa conducta. No tiene por qué avergonzarse un transexual de que le llamen transexual, Hace veinte años también se avergonzaba a los homosexuales y hoy ya se quedó obsoleto el insulto "maricón".