* El banco afirma que «no ha recibido ningún plan sostenible que haga posible refinanciar»
Imagen del consejo de administración del Valencia CF durante la junta general de accionistas El hartazgo en Bankia con las continuas promesas del presidente del Valencia C.F., Amadeo Salvo, y del presidente de la Fundación Valencia Club de Fútbol, Aurelio Martínez, sobre la presentación de planes que hicieran posible una refinanciación del préstamo, tanto al club como al accionista mayoritario, llegó ayer a su fin.
El banco esperó a que el Valencia CF celebrara ayer la junta general ordinaria de accionistas y al ver que su presidente volvía a pedir tiempo y aludía a que en «febrero o marzo tendremos un contrato con un operador para el nuevo campo» decidió pasar al ataque y poner en marcha el proceso de venta del club.
El desafío constante de Salvo, ayer prosiguió asegurando que Bankia no puede vender el club,
acabó por convencer a la entidad financiera –a la que se le deben más de 300 millones de euros– de que lo mejor era hacer valer sus intereses.
El comunicado oficial del banco hecho público en plena junta de accionistas explicaba que han trabajado «intensamente en la búsqueda de un acuerdo bueno para todos» pero que no han recibido «ningún plan sostenible que haga posible la refinanciación» de las deudas del club y de la Fundación VCF.
«Hace falta inversión para conseguir una solución global», prosiguió el escrito de la entidad financiera que considera que «la alternativa más viable es la búsqueda de inversores que permitan garantizar un buen proyecto deportivo, social y económico».
El mayor fondo del mundo
Bankia ha informado durante la última semana a la Generalitat de que hay «varios inversores solventes» interesados en la solución global del Valencia CF y uno de ellos ha cobrado «cierta ventaja» sobre los demás. La Generalitat reconoció a este diario todos estos extremos. La identidad del comprador que a Bankia le merece a día de hoy más crédito que sus rivales es el del gigante estadounidense TPG Capital. El fondo neoyorquino está considerado como el mayor del mundo en capital riesgo, como publicó en su día ABC.
260 millones de euros
La oferta por la deuda global de 300 millones de euros –Bankia considera un todo la deuda de la Fundación y del Valencia– no será con una quita del 40% como se ha llegado a decir. La oferta no bajaría en ningún caso de los 260 millones de euros. Ahora bien, esa cifra se podría elevar porque la negociación está plenamente abierta y las posibilidades de negocio son numerosas.
TPG Capital tiene una división en España, pese a que la matriz es estadounidense, y se controla desde Londres. Fernando Magnet es el representante en España y se da la circunstancia de que fue jefe de gabinete de Rodrigo Rato cuando éste presidía Bankia por lo que conoce todo lo que envuelve a los préstamos del Valencia.
El hecho de que TPG tenga más opciones no significa que esté cerrado al ciento por ciento su adquisición del Valencia CF, ya que fuentes del banco confirmaron a ABC que van a abrir un proceso «breve para escuchar a través de KPMG Asesores S.L. nuevas ofertas, algo que ya hemos estado haciendo en los últimos meses».
Tanto Salvo como Martínez se enteraron en la junta de la negativa de Bankia a refinanciar y su reacción fue desafiante. Salvo aseguró que «mientras no nos lo diga un juez el valencia sólo lo venderemos en esta junta y por el precio que digamos». Martínez aseguró que dimitirá en el caso de que se venda el club y vaticinó que vender ahora «es un suicidio» y atacó a la Generalitat porque «nunca tenía que haber dado un aval a esa Fundación».