HADES escribió:En Correos los paquetes se meten en jaulas. Cada jaula es un despacho, con una documentación en la que se detallan todos los paquetes que van en ese despacho. Es decir, que alguien leyó el código de tu EMS y lo metió en la jaula. Esas jaulas las mandan al CAM3 y ahí las cargan en un contenedor precintado que sólo se abre al llegar a Las Palmas.
Es decir, que lo más probable es que desapareciese en el CAM3 o en Las Palmas.
Tanto si desapareciese en el Cam3 como aquí en Las Palmas, ¿es Correos la culpable no?
Lo digo porque el otro día, el viernes fui a la oficina de consumo a asesorarme, y de allí me mandaron al Gobierno de Canarias, a la zona de la Junta Arbitral de Consumo, lo cual es un procedimiento voluntario y extrajudicial que permite resolver las diferencias que surjan entre consumidores y empresarios.
La reclamación que ponga en este órgano, va a la Junta Arbrital de Consumo, a las Asociaciones de Consumo y a la OMIC.
Una vez reciban mi reclamación, ésta la traspasan a quien le toque en Correos, y entonces se formará un convenio arbitral, donde habrán árbitros, uno hace de presidente y otros de abogados, me asignan uno a mi y otro a Correos...
Reunidas todas las partes, se dará audiencia a cada una de ellas y finalmente se dictará una resolución.
Bla bla bla, es un juicio, totalmente gratuíto salvo coste de peritaje que se me puedan pedir, con una sentencia equivalente a una sentencia judicial.
Total, ahora tengo que reunir papeleo, factura de USPS, factura de Paypal, y todo cuanto se me pueda ocurrir para argumentar la parrafada enorme que redactaré como queja y que así vaya más preparado y con más posibilidad de poder recuperar no el paquete, pero si el importe de éste.
Decir que el chico al que molesté en la oficina del consumidor mientras se desayunaba un bocata, se portó muy bien conmigo, me atendió de manera exquisita; pero no sólo el, tambien la muchacha que ya en el Gobierno de Canarias me asesoró y me contó cómo sería todo, además de proponerme que, antes de poner la reclamación, pase por ella para revisarla y añadir o quitar cosas según convenga, un 10 para los dos.
Y tras toda esta parrafada, quería hacer las cosas bien, y que pueda llegar yo a un buen puerto.