A través de su ventana...

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Nunca supe su nombre, aunque en sueños le puse todos los que mi mente es capaz de recordar. Le gustaba seguir un horario y cuando no lograba cumplirlo, siempre se enfadaba y refunfuñaba, se despertaba inquieta a media noche y se estiraba contra la pared.

Nunca la vi más allá, de lo que mostraba mi ventana, su pequeño cuarto, de paredes cubiertas por papel rosado. Descorchado en la esquina desde aquel póster de tela, del que no aguanto el peso.

Su risa era tan hermosa que parecía hacer claudicar el sol y las mismas estrellas. Tenía una costumbre, que la sociedad martirizaría en su ignorancia, gustaba de dormir desnuda… y antes de dormirse se miraba al espejo, ese enorme espejo de cuerpo entero, ante el cual observaba su redondeado cuerpo y alzaba sus gloriosos pechos.

No era una santa y eso lo hacía aun más hermosa. Pocos hombres cruzaban su puerta más de una vez, los vi de todas clases. Altos y fuertes, bajos y seductores… incluso aquél joven imberbe cuyo rostro al conocer el orgasmo aun recuerdo con una sonrisa.

Sabía que un día se marcharía… era ley de vida, cambio y movimiento nada permanece, pero me negaba a creerlo o al menos, a pensar en ello. Mientras hacía las maletas intenté no preocuparme; un viaje al extranjero, una escapada romántica de la que volvería extasiada para una semana… volvería… volvería como siempre había vuelto para asomarse a mi ventana.

Pero esa vez; no volvió… lo supe desde que la vi descolgar el enorme espejo y embalarlo con sumo cariño para un gran viaje. No volvería, esa era su forma de cortar con todo.

Deje pasar los días, intentando convencerme de lo imposible… finalmente me dí cuenta, de que de nuevo... estaba solo… me despedí de ella en mi mente y cerré los ojos…

Lo siento por la enfermera, le he llegado a coger cariño… pero solo seré un enfermo en coma que nunca se recuperó y que pasó años mirando con gesto vacío al mundo, a través de su ventana de hospital.

Pero ahora, tu y yo sabemos que mi vida era observar esa ventana… observarla a ella y nada mas…
Te sales macho. Me parece un texto genial, en serio. Gran historia, gran estilo, gran personaje... y final redondo. A mí desde luego me ha emocionado porque el comienzo es como que te hace sonreir, luego un poco serio y el final te deja hundido macho.



En plan corrector, con perdón:
EDITADO
Gracias VDLM; me alegra que te gustase. Hoy necesite escribir un relatito corto para despejar la mente...

Realize las correciones, gracias. [chiu]
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