Dejando atrás el excelente rendimiento comercial del primer Watch Dogs, el vicepresidente creativo de Ubisoft Montreal, Lionel Raynaud, ha compartido con CVG los planes del estudio para la posible secuela. Según Raynad, el próximo Watch Dogs abordará de forma "radical" algunos de los errores de la primera entrega, de forma parecida a lo que ocurrió en los inicios de la saga Assassin's Creed.
"Teníamos un montón de errores en la rejugabilidad de las mecánicas, y podías sentir que el juego [Assassin's Creed] era una primera iteración. Por aquella época estaba claro el potencial, pero no era fácil saber que se iba a convertir en la franquicia que es ahora", explica Raynaud. "Pasa lo mismo con Watch Dogs: Era difícil hacerlo todo al nivel adecuado, por eso tomó más tiempo".
El creativo de Ubisoft asegura que la compañía ha conseguido establecer la "marca y promesa" de Watch Dogs pese a sus fallos. "Hay errores, evidentemente. Sin duda alguna queremos afrontar esos errores y sorprender a los jugadores, y la manera de abordar algunos de esos errores será bastante radical. Hay partes del juego que tienen que cambiar".
"Tenemos la ambición de tener juegos que sean mundos con sistemas que ofrecen más independencia y libertad a los jugadores, que les permitan descubrir el mundo como deseen. Queremos que sea menos narrativo o menos basado en los personajes y más creativo, con más elecciones para el jugador".
Watch Dogs se estrenó el pasado mayo en PS3, PS4, Xbox 360, Xbox One y PC, cosechando sucesivos hitos de ventas que convierten al sandbox en el título más rápidamente vendido de la historia de Ubisoft. Pese al beneplácito de las carteras de los usuarios, la llegada de Watch Dogs no ha estado falta de polémica, tanto por su aspecto gráfico como por la muy retrasada versión de Wii U.
