Hombre, vamos a ver, que me pongáis a Linus y Stallman junto a Einstein, Fleming y Hawking lo cierto es que da una idea de vuestra cacidad comparativa.
Por otro lado estos tres últimos tienen una pinta bastante aseada, que queréis que os diga. Se puede llevar el pelo largo y bigote y no parecer un guarro (si no, mirad a Ansar xD).
También aparecen en actitudes de estar estudiando (o investigando, o impartiendo sabiduría), cosa que el pulgoso de Juanjo López todavía no ha hecho en su vida.
Para ser el secretario general del sindicato (ja!) de estudiantes hay que tener pinta de estudiante, y este tío no ha abierto un libro en su vida (o al menos no se lo ha visto haciendo tal). Me juego que lo máximo que ha llegado a leer es la etiqueta de la cerveza Cruzcampo de litro.
De todas maneras, aún metiendo a Linus y Stallman en el grupo, aún no veo la relación entre todas estas "figuras eminentes" y el sucio cavernícola que me ha estado "representando" durante todos mis años de estudiante. Desde luego ya me diréis que tienen que ver Hawking, que es miembro de la Royal Society con Juanjo López, que es miembro del club Vips y cliente preferente de Cruzcampo.
Lo cierto es que no puede ir uno a reunirse con el Presidente del Gobierno, por muy ZP que sea, (des)vestido como un animal de bellota, con el pelo sucio y piojoso y la palestina llena de sangre de los hermanos caidos en combate (en combate contra la poli cuando les pilló colándose en el almacén de revistas porno). Si yo fuera el presidente, ese tío no entraba en mi casa hasta que no pasara por un barbero y una tienda de ropa más o menos normal.
Y bueno, sí. El aspecto sí define a una persona normal y de su interés por causar una buena impresión y ser escuchado con atención. Cuando eres un genio puedes despreocuparte un poco más del tema porque tu opinión es, en sí misma, una ley; y eso que Fleming iba impecable en ese grabado. Pero mientras seas un pancartero alcoholico y vago debes intentar que la gente no tenga reticencias a darte la mano por miedo a quedarse pegados a tí el resto de la semana.