Felicidad subjetiva

A veces me pregunto quién era y no logro responderme. No logro organizar ideas y ordenar recuerdos, me resulta muy complicado recuperar sensaciones que me ayuden a comprender. Y cuando lo consigo, me resulta imposible volver al presente. Cada vez que un olor, un sabor, una nota musical, una imagen o un sentimiento me ayudan a reencontrarme, el camino de vuelta desaparece de mi vista y me veo obligado a vivir en ese instante que acabo de recordar. En ocasiones ese instante es triste, en ocasiones es alegre, pero todo lo que me hacen sentir, ¿lo estoy sintiendo realmente? ¿O no es más que el recuerdo de algo que sentí en su día? Cuando por fin vuelvo al presente y concentro mis sentidos en cada segundo que pasa, de nuevo dudas parecidas. ¿Quién soy? Esa pregunta resulta más difícil de responder, porque ya no hay recuerdos en los que apoyarse, así que miro alrededor y cuando me doy cuenta de quién soy, ya he vuelto a olvidar quién era.

De algún modo he perdido el enlace entre el pasado y el futuro. Realmente cuando miro fotos dudo de si esa persona soy yo. Sí, recuerdo ese instante, lo recuerdo desde fuera, puedo ver lo que pasó. Puedo recuperar ese sentimiento, pero yo ya no siento esas cosas, ya no vivo ese tipo de situaciones. Me resulta tremendamente difícil hacerme a la idea de que todo eso lo vivió la misma persona que veo cuando, indiferente, miro a un espejo. Parecen dos personas en vez de una. Tan diferentes… Y sobre todo con vidas tan alejadas… Sentimientos tan enfrentados...

Volviendo a recordar logro revivir algunos sentimientos que antes acostumbraba a sentir a menudo, una grabación me ayuda a lograrlo. Me surge la duda de si lo que siento es un sentimiento del presente o un recuerdo del pasado. Pero es tan real… Sí, lo estoy volviendo a sentir… Mirando el álbum de fotos he logrado sentir muchas veces esa sensación. Mientras la sentía, como en el momento de hacer esas fotos, mis preocupaciones no existían, sólo esa sensación… De hecho, logro ser feliz durante esos instantes basados en recuerdos borrosos. ¿Es eso ser feliz o un recuerdo de haberlo sido? El sentimiento es el mismo, vuelvo a escuchar esas palabras, vuelvo a sentir ese tacto, vuelvo a oler ese perfume, vuelvo a ese sentimiento… la felicidad. He intentado trasladar todo eso al presente, pero las situaciones de hoy no son las de ayer y todo cambio que he sentido ha sido provocado por esas situaciones. Ojalá esas situaciones dependiesen sólo de mí… La felicidad que siento cada día durante los instantes que dedico al recuerdo es mayor que la que siente mucha gente a lo largo de su vida. Puedo elegir cuándo y durante cuánto tiempo ser feliz cada día, sólo necesito cerrar los ojos y recordar para recuperar la sonrisa, esa sonrisa basada en el ayer. Con eso me conformo, ¿es eso bueno o malo? Es otra forma de vivir la vida. Al frente mi futuro, a mis espaldas los recuerdos. Cuando tropiece procuraré caer de espaldas.

En cualquier caso, para poder recorrer un camino, es imprescindible dar un primer paso, el más difícil de dar pero insuficiente. Así que daré ese paso y esperaré que el camino haga bajada y el viento sople a mi favor, a ver si con suerte…



Probablemente esto iría más bien en el hilo de subidones mentales...