Y así llegamos a la nueva generación de consolas, donde el principal atractivo de salida es jugar a los mismos juegos, otra vez, con cuatro mejoras.
Estamos de acuerdo en que cada uno de gasta el dinero en lo que quiera, pero inundar el mercado con morralla lastra toda la industria.
Hay que ser exigentes, y si Square, o Nintendo venden remakes, remasters o refritos perezosos, hay que criticarlo para que la próxima vez se lo trabajen más. Esto es vender reediciones del Quijote con tapas de cartulina y papel de fumar por hojas.