Gurlukovich escribió:Es bien sabido que el rey tenía prácticamente todo el poder en Castilla, mientras en Aragón cada territorio tenía sus corte y el rey debía pedir permiso para casi todo... Lógicamente procuró beneficiar y rodearse de la nobleza castellana para el gobierno, cosa que dura hasta nuestros días, e intentar que Aragón pasase a tener unas leyes a la castellana.
Qué barbaridad. Castilla funcionaba casi como una confederación, era el único reino cristiano de Europa donde prácticamente no existió feudalismo. El Consejo del Reino no era consultivo, sus decisiones eran vinculantes y a diferencia del resto de reinos, los estamentos nobiliario y eclesiástico casi nunca votaban juntos, porque la baja nobleza y el bajo clero preferían unirse a la plebe para limitar el poder de la alta nobleza.
Además, por causa de la reconquista y la repoblación, la mayoría de campesinos castellanos eran libres y propietarios de sus tierras, las ciudades eran totalmente autónomas, cada una tenía su fuero que las blindaba contra la injerencia del rey y los nobles. Así como muchos señoríos que también poseín fueros que limitaban el poder del rey en el caso de los señoríos de realengo y de los nobles o la iglesia en el caso de los que dependían de señores o abades.
El poder del rey en Castilla estaba limitadísimo y esa es una de las causas principales, aunque no la única, por las que Castilla se convirtió a finales del S.XIV y principios del S.XV en el reino más poderoso de Europa al permitir el florecimiento del comercio.
El centralismo castellano fue impuesto por los absburgo y hay que decir que Castilla fue el único territorio que se opuso a las ambiciones imperiales del rey Carlos con la rebelión de las comunidadees.
Por cierto, los comuneros, en plena guerra, enviaron embajada a Barcelona para pedir a los nobles y burgueses catalanes que no pagaran los tributos al rey y evitar que pudiera contratar mercenarios para reforzar el ejército y aplastar la revuelta. Los catalanes se negaron a recibirlos y hay que decir que luego recibieron justo castigo a su mezquindad.
Venga, seguid con los disparates, titiritiri..