Murphy Pendleton

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Murphy Pendleton es el protagonista de Silent Hill: Downpour. Al comienzo del juego, poco se sabe acerca de él o su vida, a excepción de que era un huérfano y se crió en un orfanato parecido al monasterio St. María. Es el prisionero número RS 273A y fue arrestado y encarcelado en la Ryall State Prison. Según Murphy, la razón de su arresto fue por robo de vehículo y resistencia a ser detenido por la policía. Esto llevó a los eventos de Downpour y la aventura de Murphy en Silent Hill.

Esta sección contiene spoilers.


Contenido

Antecedentes

Murphy pasó su infancia en un orfanato, lo que le impactó cuando era niño. Murphy afirma que él y todos los otros huérfanos estaban muy agradecidos con las monjas que dirigían el lugar. También se sabe (por los comentarios en la misión secundaria Cinéma vérité ) que cuando niño trabajó en un cine.

Después de dejar el orfanato, se da a entender que estuvo involucrado en conductas delictivas (como se ve en sus pensamientos sobre Carol), pero con el tiempo se detuvo, se casó y tuvo un hijo. Murphy era un hombre de familia feliz, casado con Carol Pendleton, y padre amoroso de Charlie Pendleton. Ambos disfrutaban de volar cometas, jugar con la pelota, y Murphy le enseño a Charlie sobre coches, una pasión compartida por ambos, padre e hijo.

La vida de Murphy cambió cuando su hijo fue secuestrado por un pedófilo al acecho llamado Patrick Napier. Él era, por desgracia, un vecino de los Pendleton y mostró un interés remoto en los niños pequeños. Napier secuestro a Charlie, y luego lo obligaron a subir a su camioneta y se marchó a un lago. Una vez allí, Napier metió a Charlie en un saco de lona y lo tiró al agua, ahogándolo.

La pérdida de su hijo fue demasiado para los padres. A pesar de asistir a terapia de pareja para hacer frente a la pérdida, el deseo de venganza de Murphy lo abrumó. Secuestró un coche patrulla de la policía y procedió a evadir el arresto por 10 horas. Su arresto marcó la ruptura de su matrimonio y poco después su divorcio. Lo que Carol no sabía es que Murphy lo hizo a propósito, todo con el fin de tener acceso a Napier, y, finalmente, cobrar su venganza. Carol culpa a Murphy por su divorcio, y afirma que Murphy les fallo a ella y a Charlie.


Personalidad

“Soy yo. Siempre he sido yo, mi peor enemigo, el que siempre lo echa a perder y decepciona a los demás. He intentado muchas veces empezar de nuevo y encontrar la paz, pero... De nuevo entre rejas. El capellán me dijo que no debía castigarme, pero es lo único que puedo controlar. Quizá este sitio horrible sea justo el destino al que me dirigía en todos estos años.

-Murphy, sobre si mismo.”

Teniendo en cuenta la conversación que tiene con Howard Blackwood, parece que él es un criminal, pero está lejos de ser una verdadera mala persona y realmente no busca hacer daño a nadie, es decir, a menos que sea necesario. Frank Coleridge cree que él es diferente de los otros reclusos de Ryall, presumiblemente debido a su buena naturaleza.

Tiene una voz afable y apacible, a veces incluso distante.

Parece tener una gran cantidad de dolor y odio hacia sí mismo, a causa de la muerte de su hijo. El motivo real de sus acciones es el deseo de venganza del responsable.

Tiene algo de benevolencia y nobleza dentro de él, como cuando trata de salvar a Anne Cunningham de resbalar por un precipicio, a J.P. de suicidarse (estas dos ultimas son a decisión del jugador), y a un Screamer (a quien confunde con una mujer) de los abusos de Sanchez. Murphy parece pensar en voz alta o analizar las cosas y hablar cuando quiere, posiblemente como una forma de mitigar la soledad.

Murphy también se muestra con poco temperamento, perdiendo la paciencia cuando Howard Blackwood no le da una respuesta directa y al salir de la versión del Otro Mundo de Devil's Pitstop , se grita a sí mismo "¡Vamos, vamos, vamos!".

Sin embargo, la personalidad de Murphy se deja en gran medida ambigua, ya que muchas de las decisiones mencionadas de Murphy (salvar a Anne, consolar a JP, etc) se dejan en manos del jugador y en última instancia, afectan al relato de los sucesos críticos del pasado de Murphy. Hay que tener esto en cuenta antes de tratar de comprender la verdadera personalidad de Murphy y su naturaleza.


Silent Hill: Downpour

Murphy Pendleton, un criminal condenado, es el protagonista de Silent Hill Downpour. Murphy ha estado encarcelado durante varios años en Ryall State Penitentiary después de robar una patrulla de policía. Buscando venganza por razones no especificadas, Murphy llega a un acuerdo con George Sewell, un guardia de Ryall, para que en secreto le de acceso a un recluso segregado, Patrick Napier, en las duchas de la prisión. Después de recordarle a un confundido Napier que solían ser vecinos, Murphy le pega salvajemente y la escena se corta antes de que Murphy le de el ultimo golpe.

Algún tiempo después, a raíz de un motín en Ryall, Murphy y unos pocos otros reclusos han sido programados para ser transferidos a la prisión de máxima seguridad de Wayside. Están acompañados en el autobús de transporte por Anne Cunningham, un oficial de Wayside que parece tener un desprecio particular por Murphy. El autobús pasa por las afueras del este de Silent Hill. Aquí, el camino de repente se corta en la nada, lo que obliga al conductor a girar bruscamente y hacer caer el autobús por un acantilado.

Murphy recupera la conciencia en un bosque al lado del autobús destrozado y decide seguir su camino. Anne lo encuentra cerca de un barranco e intenta detenerlo, pero resbala por el abismo y apenas logra agarrarse. Aquí, el jugador puede elegir si Murphy intentara ayudarla o la dejara caer. De cualquier manera, ella caerá en el abismo.

Murphy continúa su exploración de las afueras de Silent Hill, cuando conoce a Howard Blackwood, un cartero, extrañamente tranquilo. Durante su breve conversación, críptico, Howard le dice a Murphy que las carreteras están cerradas y que la mejor manera de salir de la ciudad es a través del viejo tranvía. De repente, Murphy vislumbra una misteriosa criatura en silla de ruedas en la ventana de una casa cercana. Al parecer, al no ver a la criatura, Howard se excusas para seguir entregando el resto del correo.

Algo confundido, Murphy sigue su camino hasta Devil's Pitstop Diner. En la cocina, Murphy encuentra una fuga de gas y trata de cerrarla, pero accidentalmente inicia un incendio en el proceso. Se activan los aspersores para apagar el fuego, pero a medida que los aspersores inundan la cocina, el restaurante se transforma en un infierno lleno de agua. Explorando este nuevo entorno, Murphy se encuentra con The Void, que rápidamente absorbe todo a su alrededor. Al darse cuenta de que no puede luchar contra la criatura, Murphy huye y, finalmente, se encuentra de nuevo en la versión normal del restaurante.

Murphy examina la zona que rodea el restaurante y entra en una casa abandonada, donde encuentra a un compañero de prisión, Sánchez, atacando a lo que parece ser una mujer indefensa. Murphy interviene, pero la "mujer" resulta ser un Screamer, que aprovechando la distracción mata a Sánchez. Horrorizado, Murphy ataca al monstruo y lo derrota. Decide explorar más a fondo, encontrando finalmente una muda de ropa y una placa de policía. La insignia está decorada con una banda de luto negra, lo que indica que su dueño ha muerto. Después de cambiarse su uniforme de prisión, Murphy juega y gana en el árcade Jail Break y consigue un boleto para el tranvía, que lo lleva a Devil's Pit en el sureste de Silent Hill.

Allí, Murphy conoce a JP Sater, un deprimente ex-guía turístico de la mina. JP le habla a Murphy sobre un viejo tren de vagones en las minas que lo llevara al centro del pueblo. En las minas, Murphy descubre un artículo de periódico que detalla un descarrilamiento de tren en Devil's Pit, que resultó en la muerte de ocho niños, y acusa a JP de negligencia. Poco después, Murphy encuentra un JP suicida cerniéndose sobre las barandas de un acantilado de observación, y el jugador tiene la opción ya sea de consolarlo o provocarlo. De cualquier manera, JP salta a su muerte. Murphy encuentra y enciende el tren, pero su viaje a través de las minas se convierte en un viaje infernal lleno de monstruos que tratan de matarlo. El tren se descarrila, y Murphy pierde el conocimiento.

Murphy se despierta cerca de una salida, pero se encuentra con Anne Cunningham, quien trata de arrestarlo. Pese a los ruegos de Murphy para cooperar, Anne se mantiene firme. Al hacer la detención, Anne lo inspecciona y encuentra la insignia de luto. Ella se angustia, mostrando que al parecer conoció a su anterior propietario. En un ataque de rabia, estuvo a punto de dispararle a Murphy, afirmando que la gente como él no merecen vivir, pero es incapaz de hacerlo y se rompe a llorar en su lugar. Anne le dice que la deje en paz, y Murphy acepta a regañadientes.

Murphy se pasea por las principales calles de Silent Hill y se encuentra con monstruos más infernales. Cuando empieza a llover, se refugia en un edificio abandonado, donde una radio cercana recoge emisiones de DJ Bobby Ricks. Algunas de las emisiones son solicitudes de canciones especialmente hechas para Murphy, mientras que otras son con motivo de tranquilizar a alguien que está escuchando. Cuando la lluvia cesa, Murphy comienza la búsqueda de Ricks y se encuentra a Howard Blackwood. Él le dice a Murphy que la estación de radio se encuentra en el Centennial Building, antes de entrar de nuevo en la niebla.

Murphy localiza el edificio, y encuentra sus papeles de libertad condicional en la entrada, lo que le hace tener un flashback de la prisión de Ryall. Él y Sewell parecen estar teniendo una conversación con respecto a su oferta. Entonces el Oficial Coleridge, que estaba observando a ambos, llama a Murphy y le entrega sus papeles. Coleridge le pregunta acerca de los motivos de su conversación, pero Murphy evade la pregunta. Coleridge le advierte que tenga cuidado al tratar con el Oficial Sewell, ya que sus ofertas no suelen funcionar tan bien para los demás reclusos. Coleridge al parecer ha hecho mucho para ayudar a Murphy a recibir una pronta liberación de Ryall, porque cree que Murphy es diferente a los otros presos, y que él es genuinamente una buena persona. El flashback termina, y Murphy continúa su búsqueda de Ricks en el interior del edificio.

Mientras sube por el Centennial Building, Murphy tiene otra visión de Ryall. En la visión, Murphy parece estar teniendo una conversación con el Oficial Sewell, y ambos han decidido seguir adelante con el plan para matar a Napier. Sewell revisa los detalles de su acuerdo y le dice ominosamente a Murphy "Me debes una".

Murphy se encuentra con Ricks, que inicialmente se comporta de una manera inusualmente casual, pero pronto empieza a hablar en voz baja, como si alguien o algo los estuviera escuchando. Ricks revela que ha estado operando la estación de radio por un tiempo muy largo, esperando ayuda. Le habla a Murphy de un bote atracado en el puerto deportivo, que pueden utilizar para escapar de la ciudad, pero le dice que primero tienen que encontrar las llaves del barco, que fueron robadas al parecer por un intruso. Cuando Murphy sugiere manipular el cableado del barco, Ricks dice que no va a funcionar, ya que la ciudad tiene "reglas" que deben ser seguidas. Antes de que puedan salir, Anne entra, una vez más decidida a arrestar a Murphy. Sin embargo, aparentemente como un castigo para Ricks por "romper las reglas", los Screamers emboscan el estudio y lo secuestran a él y Anne. Murphy se queda solo, ya que el edificio sufre una transición al Otro Mundo. Murphy huye del vacío, se encuentra con el Wheelman otra vez, y termina por caerse de la parte exterior de la torre del reloj.

Murphy despierta en una banca en el Mundo de Niebla, y una vez más se encuentra con Howard, quien le da una carta solicitando su presencia en el Monasterio St. María. Confundido y frustrado, Murphy inicialmente se niega a aceptar la carta, pero después Howard le explica que no se trata de lo que Murphy quiere (lo que sugiere que Howard sabe más acerca de las idas y venidas de Silent Hill de lo que se creía en un principio). Murphy, no teniendo otra opción, acepta la carta y continúa. Murphy pasa por el tormentoso pueblo y llega al monasterio destruido, donde una monja críptica le dice: "Tú eras el único familiar que hemos logrado localizar." Ella le pide a Murphy que explore el sitio, y la acompañe a la morgue cuando este listo.

Murphy entra en el monasterio y lo encuentra en un estado muy deteriorado, así que debe tomar una ruta alternativa a la morgue. En el camino se encuentra con un niño pequeño en el otro lado de una puerta cerrada con llave. El niño se niega a abrir la puerta porque él cree que Murphy es el "Hombre del Saco", ya que ha sido informado por una niña sin nombre que estaba llorando. La única manera de que Murphy pueda demostrar que no es el Hombre del Saco es si es capaz de recitar un poema que los niños del orfanato del monasterio rezan para que el Hombre del Saco desaparezca. Mientras explora el monasterio reuniendo las piezas del poema, los flashbacks muestran que el hijo de Murphy, Charlie, se ahogo en un lago algunos años atrás. En el presente, Murphy vuelve a la puerta con el niño tras ella y trata de recordar el poema. Por desgracia, el verdadero Hombre del Saco aparece por detrás del niño y poco a poco se acerca a él, mientras que Murphy lucha desesperadamente por recordar los versos. Murphy es capaz de recitar la mayor parte del poema, pero el Hombre del Saco mata al niño antes de que pueda terminarlo. Finalmente, el Hombre del Saco suelta al niño y se coloca un dedo en la boca, callando a Murphy, quien termina de recitar el poema.

La puerta se abre y Murphy se acerca al niño, ahora con la forma de su hijo Charlie. Llora su muerte, pero es interrumpido por una niña que lo acusa de matar al niño/Charlie. Ella corre y Murphy, con miedo de que el Hombre del Saco también la mate, la sigue. El monasterio se transforma en el Otro Mundo durante la persecución, obligando a Murphy a huir del vacío y en un momento dado incluso del mismo Hombre del Saco. Finalmente, Murphy termina en la morgue con la monja de la entrada de pie junto a una camilla cubierta. Murphy le dice que ha habido un error, y que el enterró a su hijo hace ya años. La monja le responde explicándole cómo todo el mundo se lamenta a su manera, y quita la sábana que cubría el cuerpo, revelando bajo ella al Hombre del Saco, inconsciente. Enfurecido, Murphy grita que no es su hijo, que es un asesino, pero la monja insiste en que Murphy lo acepte como propio. Murphy le pregunta por qué le está haciendo esto, y en respuesta, la monja con calma le informa de los peligros de la venganza y la ruta que Murphy se ha fijado por seguir este camino. Murphy admite que "lo que hizo" a Patrick Napier no resuelve nada, pero aún así intenta racionalizar su conducta. Ella simplemente le dice que las respuestas están justo en frente de él si así lo desea mirar.

Murphy observa una llave con un llavero de plata que tiene la etiqueta "libertad" en el cuello del Hombre del Saco, la cual coincide con la descripción de la llave del bote de Ricks. La monja le dice que es suya, si la quiere, pero sólo si acepta al Hombre del Saco como suyo. Murphy toma la llave, lo que despierta al monstruo. El monstruo ataca a Murphy e inmediatamente se transportan a un área boscosa al lado de un lago. Ambos pelean y Murphy termina por matar a la criatura. A continuación, se encuentra de nuevo en la morgue con el Hombre del Saco muerto en la camilla a su lado con su máscara quitada, que revela su rostro aleatoria mente como Murphy y Napier. Charlie aparece, y felicita a su padre por derrotar al Hombre del Saco. Murphy le dice que no importa, pues esto no lo traerá de vuelta, a lo que Charlie le consuela diciendo que no fue su culpa.

Ahora que Murphy tiene las llaves del bote, escapa como puede del monasterio, a través de las alcantarillas, hasta llegar a los muelles. Una vez que llega, enciende el bote y se aleja de Silent Hill. De repente, Anne aparece tras de el apuntándole con una pistola, ordenándole que le de vuelta al bote y regrese a Silent Hill. Ella le dice que la ciudad le mostró cosas, que la conoce, y que la ciudad no los dejara libres hasta que resuelvan sus asuntos pendientes. Murphy se niega a regresar, y le dice "puedes pegarme un tiro si quieres". Anne lo hace.

Un flashback muestra una reunión entre Sewell y Murphy en la prisión. Sewell le recuerda a Murphy que él fijó la reunión entre él y Napier, el hombre que mató a Charlie, y miró hacia otro lado mientras lo mataba y que es hora de que Murphy le devuelva el favor. Sewell le dice a Murphy que su trabajo es matar a un sujeto desconocido, que se supone es un recluso que "se lo merece". A continuación, explica que habrá un motín en la prisión esa noche, permitiendo que Murphy pueda escapar a las duchas, donde se encuentra esta persona.

Murphy se despierta dentro de una celda de prisión en Overlook Penitentiary, con The Wheelman sentado justo fuera de la celda observándolo. Después de unos segundos las puertas se abren, permitiendole a Murphy explorar la prisión. Encuentra una nota dirigida a él, diciéndole que conociera a alguien en las duchas. Avanzando a través de la prisión y luchando contra varios enemigos, Murphy finalmente llega a las duchas. En el interior hay cuatro marcadores de una escena del crimen, que señalan un charco de sangre, un cuchillo de prisión, una placa de policía de luto, y una bolsa de evidencia de la escena del crimen. Después de examinar las cuatro, se oye una voz tras de Murphy, seguida por el resplandor de una linterna. Murphy se acerca a la luz que se apaga tan pronto como él se acerca, y la sangre comienza a filtrarse por debajo de las puertas. Al abrirlas, Murphy encuentra otra sección de las ducha con un cuerpo metido en una bolsas.

Cuando Murphy se acerca al cuerpo, el mundo que le rodea se transforma en el Otro Mundo. Murphy corre, evitando enemigos y el vacío una vez más, y finalmente llega a una gran puerta, con una gran balanza de justicia ante ella. Murphy pone el cuchillo de prisión, la bolsa de evidencia de la escena del crimen y la insignia de luto en una escala y las puertas se abren. En el interior, rodeado de plataformas y celdas de prisiones, se encuentra una versión mucho más grande de The Wheelman que ha estado siguiendo a Murphy a lo largo del juego. El monstruo se convierte rápidamente en hostil y Murphy tiene que correr por la habitación, sacando los tubos de soporte vital que están conectados al monstruo para matarlo.

Después de que The Wheelman es derrotado, Murphy se encuentra de nuevo en las duchas con la versión débil del monstruo muerto a sus pies. Anne entra, y se horroriza de lo que Murphy ha hecho. Confundido, Murphy mira hacia abajo y se encuentra con que en lugar del cadáver de The Wheelman se encuentra el cuerpo de Frank Coleridge, un oficial de policía amable de Ryall, que había advertido insistentemente a Murphy de no socializar con Sewell. Un flashback revela que cuando Murphy se dirigió a las duchas en la noche del motín en la cárcel, armado con un cuchillo de prisión escondido detrás de su espalda, Frank Coleridge fue el que lo esperaba. Coleridge le dice a Murphy que Sewell se suponía que debía reunirse con él allí, antes de darse cuenta de que Murphy ocultaba algo detrás de su espalda. Sewell entra en la habitación e intenta convencer a Murphy de que mate a Coleridge y cumpla su parte del trato, mientras que Coleridge intenta convencer a Murphy de soltar su arma.

De vuelta al presente, Anne revela que Coleridge era su padre. Ella le dice a Murphy que era un buen hombre y que lo idolatraba, incluso siguiendo sus pasos para convertirse en policía. Después de que Frank Coleridge fue atacado, cayó en un estado vegetativo; teniendo que depender de una silla de ruedas y apoyo hasta el día de su muerte. Debido a que en este momento, Anne no se da cuenta de la participación de Sewell en el asesinato de su padre, le dice a Murphy que cada vez que miraba a su padre en su estado físico deteriorado, ella sólo vio a un monstruo: Murphy. Murphy se transforma en el Hombre del Saco mientras ella explica como tuvo que mover los hilos, pedir favores y hacer "cosas enfermas", a fin de que Murphy fuera trasladado a la prisión donde ella trabajaba, probablemente para poder matarlo ella misma. Después de concluir su discurso, Anne le dispara a Murphy, quien la persigue en su forma de Hombre del Saco. Dependiendo de si el jugador sobrevive a este encuentro o no, junto con las elecciones morales que ha hecho durante todo el juego y si decide matar a Anne o dejarla vivir, varía la conclusión de la batalla y el destino de Murphy.


Destino

Al igual que todos los otros juegos de Silent Hill, Downpour tiene múltiples finales, diseñados para mostrar las muchas maneras en que el juego podría terminar. También incluye un final broma, como la mayoría de la serie.

Perdón

Murphy le dice la verdad a Anne, que él no era responsable de la muerte de su padre. Consciente de esto, ella lo perdona, reconociendo que Murphy era un hombre bueno que sólo se preocupaba por su hijo. Dejando el deseo de venganza atrás, Murphy y Anne aparecen a la orilla de lo que parecen ser el lago Toluca. Ella informa por el radiotransmisor a los demás guardias que Murphy ha muerto, y entonces, después de una despedida, se aleja para comenzar una nueva vida.

Circulo Completo

Después de matar a Anne, y darse cuenta de que también había matado a Frank, Murphy entra en un estado de shock y se horroriza al ver en lo que se ha convertido. Destruido, coge la pistola de Anne, se la pone en la sien y dispara, tratando de poner fin a la terrible experiencia de una vez por todas. Sin embargo, despierta una vez más, exactamente en el mismo lugar donde despertó cuando llegó por primera vez a Overlook Penitentirary. Murphy entonces escucha las voces de Howard, Bobby Ricks y JP y se da cuenta que él también se ha quedado atascado en un bucle infinito, condenado a pasar una eternidad en el pueblo como residente permanente.

Verdad y Justicia

Este final es muy similar al final Perdón. Sin embargo, Murphy reaparecen junto con Anne en el lugar del accidente de autobús, bajo una fuerte tormenta. Antes de irse, Murphy explica a donde ira. Después de esto, Anne es vuelta a ver en la Ryall State Prison. Ella va a visitar a Sewell en su oficina con una pistola escondida en la espalda, y le dice que Frank Coleridge era su padre, y que ella y Sewell "necesitan hablar". Este final implica que Anne todavía tiene un cierto deseo de venganza dentro de ella.

Ejecución

La pantalla se desvanece rápidamente y revela una cámara de ejecución en Ryall. Murphy fue programado para ser ejecutado por el asesinato de su propio hijo, un delito que cometió en represalia hacia su esposa por tomar la custodia exclusiva de Charlie. También fue declarado culpable del asesinato del oficial Frank Coleridge. Antes de que se le aplique la inyección letal, Sewell le pregunta por sus últimas palabras. Él responde: "Nos vemos en el infierno, Chico" antes de morir. Una conversación que Murphy tuvo con JP sugiere que este final no es el canónico.

¡Sorpresa!

Murphy es visto cavando un agujero con una cuchara tratando de huir de Overlook. Después de que llega a la superficie, se da cuenta de que hay una fiesta de cumpleaños sorpresa para él, con un gran pastel sobre una mesa en el centro de la habitación. Los invitados a la fiesta incluyen a James Sunderland, Mary Shepherd-Sunderland, Laura, Heather Mason, Anne, Frank, Sewell, el niño del monasterio, Ricks, dos enfermeras y Pyramid Head, el cual corta el pastel (y como chiste, la tabla bajo esta) a la mitad con su gran cuchillo. Este final solo se puede conseguir después de completar una segunda partida y haber completado la mision secundaria "Objetos inutiles".

Inversión

En una realidad alternativa, este final muestra a Murphy como un guardia de la Ryall State Correccional Facility, en sustitución de Sewell. En su lugar, como una prisionera, está Anne, que ve con horror como se ha convertido en lo que más odiaba: Murphy. Este final se consigue si el jugador es asesinado por Anne durante la lucha final.


Razones de su encarcelamiento

Dependiendo de cómo se comporta el jugador durante el juego, y el final que recibe, varían las razones del encarcelamiento de Murphy.

Robo de automóvil, persecución y resistencia: el motivo canónico para su encarcelamiento. Un tiempo después de la muerte de su hijo, Murphy robó una patrulla de policía y comenzó una persecución de diez horas por la costa este. Murphy fue finalmente capturado y encarcelado en la Ryall State Penitentiary. Poco después, su esposa Carol se divorcio de el. Lo que ella no sabía, sin embargo, es que Murphy dejo que lo arrestaran a propósito, todo con el fin de vengarse de Napier, la persona responsable de la muerte de su hijo.

Especulaciones sobre el asesinato de Charlie: la razón no canónica de su encarcelamiento. El final "Ejecución" revela que Murphy supuestamente asesinó a su hijo de cuatro años antes de los acontecimientos del juego, para vengarse de su esposa, Carol, quien buscaba la custodia exclusiva de su hijo, después de su divorcio. La conversación entre Murphy y JP sugiere que este final no es canónico, como dice Murphy, que no sería capaz de vivir consigo mismo si le hiciera daño a algún niño.


Curiosidades

  • En las primeras demostraciones de Silent Hill: Downpour, el nombre de Murphy era originalmente Jack.
  • Murphy tiene cierta semejanza con Henry Townshend, sobre todo en su peinado y nariz. En una inspección más cercana, sin embargo, se pueden observar algunas diferencias: Murphy tiene una mandíbula menos cuadrada, la cara más estrecha, y su mentón es más prominente. Sus ojos son más oscuros, están más juntos y su cabello cubre menos sus orejas.
  • El nombre de Murphy es un homenaje al personaje ficticio Randle McMurphy de la novela One Flew Over the Cuckoo's Nest.
  • Su apellido, Pendleton, es también el nombre de una penitenciaría de Oregon, Estados Unidos.
  • Murphy tiene un corte debajo del ojo derecho, pero se desconoce cómo se lo hizo. Lo más probable es que se lo hiciese en una pelea en la prisión.
  • Hay graffitis acusatorios en la celda de Murphy.
  • En ciertos puntos del juego se puede oír una voz misteriosa, ofreciéndole a Murphy consejos y advertencias de peligro. Las primeras palabras que dice son: "No puedes deshacer lo que ya has hecho, pero puedes hacer frente a ello". Más tarde, también se le puede oír decir en el Otro Mundo cuando The Void se manifiesta: "Murphy, ¡corre!"
  • La primera parte del número de prisionero de Murphy son las iniciales de Ryall State Penitentiary (RS). La segunda parte (273A), es el mismo código que el Código Penal 273A en California, que se refiere al asesinato y asalto de niños. Las escenas de un niño fantasma en el tráiler puede aludir a por qué Murphy fue encarcelado.
  • Murphy es el segundo protagonista de la saga que puede luchar contra los monstruos con sus puños desnudos, el primero es Travis Grady.
  • Murphy tiene cierto conocimiento acerca de automóviles. Puede determinar con exactitud el modelo, el año y el motor de un coche con sólo darle un vistazo.
  • A Murphy le gusta llamarse a sí mismo "Murph".
  • Murphy es el único protagonista conocido por estar en la cárcel por delitos cometidos.
  • Al comienzo del desarrollo del juego, Murphy iba a ser un hombre inocente injustamente encarcelado por un crimen que no cometió. Sin embargo, esto cambió, y Murphy está encerrado por el robo de un coche y resistencia a la autoridad.
  • Murphy responde a sus entornos. Por ejemplo, si está cerca de una repisa camina despacio, pero si está en una carretera abierta corre libremente.
  • En el juego se puede ver que en su celda hay dibujos de Charlie y fotos de Murphy junto con su esposa. Lo que demuestra el gran cariño que tenia a su familia.
  • El número de la celda de Murphy es la 302B, esto es una referencia al Apartamento 302 de Silent Hill 4: The Room.
  • Según los textos de la galería de bonificación, Murphy se crió en un orfanato. Contradictoriamente, en la misión secundaria "El Gramófono", en su diario afirma que el gramófono es exactamente igual al que tenía su abuela. Aunque esto podría sugerir que Murphy fue adoptado y se refiere a su abuela adoptiva.
  • Murphy es el segundo protagonista en convertirse en un monstruo, el Hombre del Saco (siendo el primero Alex Shepherd, en el Final Sentencia en Silent Hill: Homecoming, donde se convierte en un Pyramid Head).
  • Se creía ampliamente que Murphy sufría de acuafobia, (el miedo al agua), a causa de la trágica muerte de Charlie. Sin embargo, Tomm Hulett confirmó en una entrevista que esto no era verdad.
  • En Silent Hill: Revelation, se hace una referencia a Murphy al final de la película. Mientras Heather Mason y Vincent Cooper son llevados a casa por el camionero Travis Grady, estos se cruzan con el autobus en el que va Murphy de camino a Silent Hill perdiendose entre la espesa niebla.
  • Murphy también hace un cameo en el final cómico de Silent Hill: Book of Memories. Aparece arrestado dentro de el coche patrulla de Cybil Bennett, después de que esta detuviera a Trevor. Cuando Trevor entra en el coche y se encuentra con Murphy, este le pregunta por qué lo arrestaron, a lo que Murphy le responde: "En verdad, desearía saberlo... creo que las mujeres policía simplemente me tienen manía...". Esto último es una referencia a Anne Cunningham.