Tony Bartel, presidente de GameStop, ha mostrado su preocupación por la erosión de los precios digitales, una tendencia que encuentra alarmante tanto por su empresa como para la industria en su conjunto.
Batrel también señaló que la promoción de incluir juegos descargables en los packs con consola ha tenido un significativo impacto. Estima que durante esta temporada de compras los jugadores recibirán juegos por valor de 100 millones de dólares mediante los packs de hardware.
“Queremos ayudar a garantizar que nuestra industria no cae en el mismo error que otras categorías de entretenimiento al hacer que los valores de los productos digitales se perciba inferior al del juego físico”, dijo Batrel. “Cuando se terminen las ofertas de títulos gratis, creemos que la industria tendrá que trabajar conjuntamente en fijar unos precios que mantengan la rentabilidad y animen a la innovación que este sector necesita”.
El máximo responsable de GameStop afirma que los jugadores pagan una media de 22 dólares (no especificó plataforma ni tiempo desde el lanzamiento) por los títulos digitales, cuando estarían dispuestos a pagar 35. A su juicio se trata de un precio “insostenible” teniendo en cuenta que el mismo juego en formato físico sube hasta los 60 dólares.
Entre los planes de GameStop se incluye la posibilidad de vender títulos digitales de segunda mano, un mercado que de ser tan lucrativo como el físico reportaría grandes beneficios a la compañía. Cuando se le preguntó al director ejecutivo de la compañía J. Paul Raines sobre este tema se limitó a decir, “sin comentarios, alto secreto”.
